El aspirante a presidente de Colombia, Gustavo Petro, ya lo dejó claro en debate y es comprobable: en sus campañas presidenciales nunca se ha hablado de expropiaciones al sector privado por parte del Estado. Sin embargo, ha dicho que «el mayor expropiador que ha habido en Colombia fue el gobierno actual (el de Iván duque) el que acabó 500 mil empresas, las acabó, se perdieron tres millones de empleos”. Esto ocurrió en medio de la crisis por la pandemia de COVID-19, pero no por la propia emergencia sino por las políticas implementadas por un gobierno que, hay que decirlo, es de derecha y muy conservador.

La constatación de esto es la frustración e indignación que cada tanto sumerge a Colombia en paros nacionales de todos los gremios.

En este capítulo de Entre Líneas revisamos qué propone y qué no el actual senador y candidato a la presidencia de Colombia.

Los enemigos de Colombia y de Petro

En 2005, Gustavo Petro reveló que la campaña presidencial de Álvaro Uribe en 2002 había recibido apoyo económico de Enilse López ‘la gata’, condenada posteriormente por nexos con las Autodefensas Unidas de Colombia.

En 2006, Petro fue elegido senador de la república con la tercera votación más alta del país, se estrenó destapando el escándalo de la llamada parapolítica, que demostraba vínculos de políticos con grupos paramilitares.

En 2007 Petro llevó a cabo en la plenaria del congreso un debate sobre las CONVIVIR y el desarrollo del paramilitarismo en Antioquia dedicando un apartado especial a Uribe y su actuación en el departamento.

Desde entonces ha sido piedra en el zapato recabando evidencias que le han supuesto a Uribe severas sanciones sociales, que hicieron a la Corte Penal Internacional girar la vista hacia sus desmanes catalogados en casi 300 procesos en su contra en la Fiscalía General de Colombia. Recordemos que el fetiche del expresidente Uribe es corromper los poderes públicos en ese país, y lo suele satisfacer. 

Además, Petro tiene entre sus enemigos a los dueños de las empresas de armas de fuego, y a los sectores conservadores que se oponen al aborto.

Petro y la búsqueda de “una sociedad de conocimiento y sensible”

En su momento, Gustavo Petro asumió como guerrillero el alias “Comandante Aureliano”, lo que lo delata como una figura muy influenciada no solo por Cien años de soledad, sino por la vasta obra del escritor Gabriel García Márquez y su visión realista y mágica de Colombia.

Gustavo Petro ha aclarado que el pacto histórico no es una fuerza de izquierda, sino que es diversa, la satanización llega porque la diversidad usualmente le molesta a los referentes de la derecha en Colombia. Tanto como les molesta que a 4 meses de la primera vuelta, Petro sea el único candidato que aparece como un fijo y favorito en la boleta electoral. 

(LaIguana.TV)