Estados Unidos negó que, por ahora, esté en conversaciones con el Gobierno de Venezuela para importar crudo y, antes bien, se conoció que instruyó a Colombia, su principal aliado regional, para que aumentara su participación en el mercado mundial, reseña EFE.
«No es algo sobre lo que estemos conversando de forma activa por ahora», aseguró este lunes Jen Psaki, secretaria de prensa de la Casa Blanca, al ser inquirida en una rueda de prensa sobre la posibilidad de que Washington relaje las medidas coercitivas unilaterales impuestas sobre la industria petrolera venezolana, dada la crisis desatada en el mercado de hidrocarburos tras la imposición de sanciones a Rusia.
A este respecto, la funcionaria también descartó que se estuviera planeando otorgar una licencia especial a la multinacional Chevron para que importara petróleo de Venezuela, como especularon fuentes periodísticas e insistió en que «por ahora» no está prevista tal transa.
Por su parte, el canciller Félix Plascencia aseguró que Venezuela solamente volverá a vender petróleo a Estados Unidos y a los países de la Unión Europea cuando reconozcan al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
«Tenemos una relación de negocio petrolero con Estados Unidos de 100 años. Nosotros no los hemos sacado a ellos del negocio, se fueron ellos para poner medidas coercitivas. Ahora quieren regresar. Bueno, si aceptan que el único y legítimo Gobierno de Venezuela es el que lidera el presidente Nicolás Maduro, bienvenidas las empresas petroleras estadounidenses y europeas«, indicó el pasado sábado en el Foro Diplomático celebrado en Antalya, Turquía.
La semana previa, la administración Biden admitió conversaciones con los gobiernos de Venezuela e Irán en los que el tema energético estuvo sobre la mesa, si bien diferentes portavoces aseguraron que aún no se había tomado ninguna decisión al respecto.
Sin embargo, el encuentro en Caracas entre el presidente Nicolás Maduro y una delegación estadounidense de alto nivel, generó resquemores dentro de los sectores más conservadores del país norteamericano y malestar entre aliados cercanos, como el mandatario colombiano, Iván Duque, quien fue atendido en la Casa Blanca el pasado jueves.
Tras la reunión bilateral, Duque anunció que ofreció a Biden suministrar más petróleo colombiano a Estados Unidos para suplir el vacío dejado por el crudo ruso.
Sin embargo, Psaki matizó los dichos del gobernante neogranadino y si bien admitió que efectivamente se habló del tema en la conversación en el contexto de la «seguridad energética global», aseveró que no tenía otros detalles.
«Seguimos hablando con una serie de productores sobre la importancia de mantener el suministro global. Esto no se trata sólo del suministro en Estados Unidos, sino de asegurar el suministro al mercado global, y apreciamos nuestra relación con Colombia», puntualizó al respecto.
(LaIguana.TV)