En medio de los recientes acercamientos entre Estados Unidos y Venezuela todo apunta a que posiblemente haya un relajamiento de sanciones contra la nación suramericana, dijo el analista venezolano, Enrique Ochoa, en entrevista con la Agencia Sputnik.

«Todo parece indicar que así va a ocurrir, que se relajarán las medidas coercitivas de EEUU contra Venezuela a este respecto, lo que además se corresponde con la correcta decisión del Gobierno de Maduro de incorporar al capital privado internacional, incluso estadounidense pero europeo e indio, en el negocio petrolero venezolano», comentó el escritor y dirigente político.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, confirmó que sostuvo el pasado 5 de marzo una reunión en Caracas con una delegación de la administración de Joe Biden.

La Casa Blanca aseguró que por el momento no estudia comprar petróleo a Venezuela, aunque indicó que en la visita de sus delegados se abordó, entre otros temas, la seguridad energética.

La industria petrolera venezolana desde 2017, es blanco de sanciones que impiden cualquier transacción con empresas que utilicen el sistema bancario estadounidense.

Es la primera vez, desde la ruptura de relaciones en 2019, que ambos gobiernos confirman que sostuvieron conversaciones sobre el tema energético, y este hecho tiene lugar en medio de la crisis que se vive entre Rusia y Ucrania, que ha provocado un alza abrupta del crudo y sus derivados.

Negociación directa

Ochoa señaló que ambas partes deben negociar de modo directo, sin la intervención de dirigentes de la oposición como ocurrió en 2019 y 2021.

En el panorama actual, el analista consideró que existen razones coyunturales para avanzar en un proceso de diálogo.

«Claro, existe una razón coyuntural: la guerra en Ucrania, las sanciones de EEUU y Europa a Rusia, que han incrementado los precios de los combustibles. La expectativa de EEUU es que Venezuela eleve su producción y la de Venezuela que EEUU ayude a ese interés mutuo, por ejemplo, a través de Chevron», apuntó.

En ese sentido, el analista consideró que tanto EEUU como Venezuela deben tener en cuenta que estas conversaciones son una oportunidad para comenzar una nueva época en sus relaciones.

Destacó que Maduro tiene que tomar en cuenta el beneficio que representa para la economía de Venezuela el levantamiento de las sanciones económicas, especialmente, porque se trata de un mercado cercano con 350 millones de consumidores.

Respeto mutuo

Del mismo modo, el analista apuntó que el éxito de estas conversaciones en gran parte dependerá de que Estados Unidos mantenga una política de respeto y entendimiento.

«Tanto EEUU como Venezuela deben tener en cuenta que estas conversaciones son la oportunidad de iniciar una nueva época en sus relaciones, de respeto mutuo y de beneficio (…) EEUU debe dejar de ver a Venezuela como un enemigo y a América Latina como su patio trasero, y percibir que en un nuevo mundo multipolar toda relación con Venezuela comienza por respetar su soberanía», dijo Ochoa a Sputnik.

«El ejemplo de la exitosa izquierda democrática latinoamericana como Luis Inácio Da Silva en Brasil, José Mujica en Uruguay, Rafael Correa en Ecuador, Néstor y Cristina Kirchner en Argentina, Michelle Bachelet en Chile y Evo Morales en Bolivia, muestra que es posible tener con EEUU una relación civilizada e inteligente», sostuvo.

En cuanto al efecto que puede tener esta negociación en las relaciones entre Rusia y Venezuela, Ochoa indicó que lejos de afectarlas puede ser beneficioso.

«Que Venezuela tenga buenas relaciones políticas con Rusia, que ha sido un socio privilegiado en medio de las mal llamadas «sanciones» gringas, no impide para nada que haga negocios con EEUU. Incluso para Rusia es positivo: la recuperación económica de Venezuela puede ayudar a que pague la enorme deuda que tiene con Rusia, a la que no puede pagar con petróleo [como hace con China] porque Rusia tiene petróleo de sobra», dijo.

El analista repudió las críticas que ha habido contra el Gobierno venezolano por el acercamiento con Estados Unidos y consideró que se encuentran «totalmente desfasados del mundo actual».

Las autoridades venezolanas han denunciado que desde el año 2015 su país enfrenta más de 500 sanciones que imposibilitan «el pleno disfrute y garantía de los derechos humanos del pueblo venezolano».

Estas medidas apuntan a la mayoría de los altos cargos de la nación caribeña y también a las principales industrias de la nación.

(Sputnik)