Durante meses, el exgobernador de la Fed, Roger Ferguson, ha temido que los peligros de una recesión hayan ido en aumento. Ahora, dijo, una recesión en 2023 es casi inevitable, con probabilidades indudablemente superiores al 50%, según comentó en una entrevista el lunes en CNBC.

“‘Creo que una recesión, en esta etapa, es casi inevitable. La posibilidad de una recesión en 2023 es realmente muy, muy alta, debido a los desafíos de controlar esta inflación al alza y tener tan pocas herramientas para controlar el lado del suministro de la economía”.

Ferguson dijo que creía todo esto por los indicadores recientes que mostraban una expansión financiera internacional más débil, la cual se ha visto incluso en China.

“El resto del mundo también se está desacelerando de manera bastante dramática”, dijo Ferguson. Y esto ocurre justo cuando la Reserva Federal y otros bancos centrales están comenzando a aumentar las tasas de interés para tratar de frenar la inflación.

Ferguson fue gobernador y luego vicepresidente de la Reserva Federal desde 1996 hasta 2006.

A pesar de los signos de desaceleración desde el extranjero, la Reserva Federal no tiene otra opción que continuar con el aumento de las tasas, dijo Ferguson. “Han logrado mantener la credibilidad, que hasta la fecha lo han hecho razonablemente bien”, dijo.

El banco central validará la expectativa del mercado de varios aumentos de tasas de medio punto porcentual este año.

Todo esto significa que una recesión podría estar en el futuro próximo. En el mejor de los casos, podría ser que solo ocurra una recesión ligera.

Si la economía puede salir de la probable recesión con solo dos cuartas partes del PIB desfavorable, podría ser una victoria, dijo Ferguson.

Las acciones Dow Jones bajaron el lunes debido a la preocupación sobre el impacto económico de las inminentes alzas de tasas de la Reserva Federal.

(El Diario NY)