Cuba elimina desde hoy el uso obligatorio de mascarillas para todas las actividades sociales, excepto en consultas médicas y servicios hospitalarios que lo requieran, informó el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal.

También se mantiene en áreas con restricción donde pueda haber un control de foco y sea necesaria su utilización, así como en quienes presenten síntomas respiratorios, precisó el titular la víspera en el espacio radiotelevisado Mesa Redonda.

Insistió en la importancia de que las personas vulnerables continúen con el empleo del medio, no solo ante la Covid-19, sino es conocida su utilidad frente a otras enfermedades, subrayó.

La cartera sanitaria recomienda -destacó-, similar a como lo han hecho otros países, el uso de la mascarilla en escenarios de aglomeraciones y ejemplificó con los ómnibus urbanos, en las colas donde hay varias personas o en espacios donde no sea posible mantener el distanciamiento físico.

En centros laborales y estudiantiles ratificó la decisión de no permitir la entrada de ciudadanos con síntomas respiratorios en cualquiera de las variantes de la causa que pueda tener la enfermedad.

Llamó en esos casos, igual en los servicios sanitarios, áreas de elaboración y expendio de alimentos, a garantizar los recursos para el lavado y desinfección de las manos.

De similar manera -enfatizó- se elimina el uso obligatorio de los pasos podálicos a la entrada de las instituciones o entidades.

El titular aseguró que el ministerio de Salud continuará con las capacitaciones sistemáticas, actualizando a los trabajadores en las normas higiénicas de protección tanto individuales como colectivas.

Apuntó que la efectividad de las medidas adoptadas se evaluará periódicamente, de forma tal que permita hacer los ajustes necesarios.

Ninguna de las medidas es inamovible, remarcó la autoridad y agregó que su permanencia en el tiempo dependerá de la situación epidemiológica en el país y de lo que seamos capaces desde la responsabilidad.

Que podamos adoptarlas es una muestra de cuánto hemos avanzado en el control de la pandemia y del hacer conjunto del gobierno, los profesionales de la salud, la ciencia y el pueblo de manera general, valoró.

Los niveles de inmunización alcanzados son una fortaleza y nos distingue de la mayoría de los países, ponderó además el titular de salud cubano.

El reto está en aprender a vivir con la Covid-19 y trabajar todos juntos para seguir devolviendo la vitalidad a las principales actividades económicas, sociales y de servicios que desarrolla Cuba, concluyó.

Esta isla caribeña lleva nueve semanas consecutivas con una disminución en el número de casos, una reducción a un ritmo más acelerado en las últimas dos y 19 días consecutivos sin fallecidos, solo dos en mayo, describió con anterioridad la viceministra de Salud Pública, doctora Carilda Peña.

(Prensa Latina)