Turquía se desmarca de las sanciones que imponen países occidentales como EE.UU. y la Unión Europea (UE) a Rusia por la operación militar en Ucrania.

Ibrahim Kalin, portavoz del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, manifestó que Turquía mantiene buenas relaciones con los países occidentales, pero intenta tener “una política de equilibrio” con Rusia, considerando su dependencia de los suministros energéticos.

Si todo el mundo tira puentes, ¿quién acabará hablando con Rusia? Nuestras relaciones económicas son de tal naturaleza que la imposición de sanciones perjudicaría más a la economía de Turquía que a la de Rusia. Hemos adoptado una postura clara, y ahora los occidentales lo han aceptado. No dicen nada sobre la posición de Turquía [sobre las sanciones] por razones geopolíticas”, explicó Kalin.

El vocero puso de relieve los esfuerzos de Turquía como intermediario para proporcionar las condiciones de una negociación entre Rusia y Ucrania que ponga fin al conflicto militar entre los países vecinos, iniciado el 24 de febrero.

¿Cómo ve Ankara la tensión ruso-ucraniana?

Desde el comienzo de la operación militar rusa en Ucrania, Turquía ha intentado mostrar una postura intermedia, puesto que tiene buenos lazos con ambas partes del conflicto. Por su parte, el presidente turco ha reiterado en varias ocasiones que Ankara, como un aliado de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y vecino limítrofe de Ucrania y Rusia en el mar Negro, busca tener buenas relaciones con ambos países.

(HispanTV)