El euro sigue a la baja este 11 de julio y hace unas horas alcanzó su nivel más bajo desde diciembre de 2002, al situarse en 1,0096 dólares, según los datos oficiales.

Al mismo tiempo, el tipo de cambio entre el dólar y el yen subió a 137,07 yenes desde 136,08 yenes.

El índice del dólar (el tipo de cambio frente a una cesta de monedas de seis países socios comerciales de Estados Unidos) aumentó un 0,65%, hasta los 107,7 puntos.

La moneda europea sigue afectada por la crisis energética de la región, agravada, entre otros factores, por la suspensión del funcionamiento del gasoducto Nord Stream.

El gasoducto está parado por razones técnicas desde el 11 de julio, y en los mercados crece el temor de que no vuelva a ponerse en marcha.

Además, según la ‘estimación relámpago’ de Eurostat, el organismo de estadística de la Unión Europea informó que la inflación anual en la zona del euro subió cinco décimas el pasado mes, del 8,1% en mayo al 8,6% en junio.

En junio de 2021, la inflación anual en el área del euro era del 1,9%.

La energía sigue siendo el mayor componente de la inflación, con una tasa acumulada del 41,9% en junio en relación con el 39,1% en mayo.

Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar especial en Ucrania alegando que las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, reconocidas por Moscú tres días antes como estados soberanos, necesitan ayuda frente a la agresión de Kiev.

Uno de los objetivos fundamentales de esa operación, según Putin, es «la desmilitarización y la desnazificación» de Ucrania.

Tras la operación especial militar, varios países establecieron sanciones contra Moscú, las cuales van desde la desconexión parcial de Rusia del sistema SWIFT, el cierre del espacio aéreo para las aerolíneas rusas y la paralización de las reservas internacionales del Banco Central de Rusia.

Las sanciones contra Moscú ocasionaron a nivel mundial el alza de los precios del petróleo, gas y fertilizantes.

(Sputnik)