Se están perfilando cambios en dos de las relaciones bilaterales más importantes del país: con Estados Unidos y con Colombia, el promotor y uno de los ejecutores principales de las políticas de agresiones y atentados contra Venezuela en los últimos años.

Sobre de la trascendencia y características de estos cambios versó el programa Desde donde sea, que modera el filósofo y comunicador político Miguel Ángel Pérez Pirela.

“Hace algunos meses habría sido muy difícil pensar que los gobiernos de Estados Unidos y Colombia se iban a acercar al de Nicolás Maduro, pero ahora ambos lo están haciendo. El de Joe Biden envía secretarios (figura equivalente a la de un ministro en nuestra estructura jerárquica) a negociar a Caracas para atender la carencia energética producto de la guerra en Ucrania y de las sanciones que Estados Unidos y Europa han tratado de aplicar a Rusia –dijo en la introducción del reportaje-. Y el gobierno electo de Colombia, encabezado por Gustavo Petro, anuncia nuevos enfoques para las relaciones bilaterales, luego de los oprobiosos años de Iván Duque, en los que el país vecino ha cometido toda clase de ataques, no por iniciativa propia, sino como producto de su esclavitud ante el gobierno de Estados Unidos, una auténtica vergüenza para Colombia, país suramericano y nuestroamericano”.

Señaló que si bien es obvio el interés de Estados Unidos por el petróleo, antes de hablar de energía en estas conversaciones se hablado de política, de cómo Estados Unidos ha perseguido a Venezuela en todos los campos (diplomático, económico, militar, mediático), al punto de crear un gobierno fantoche paralelo.

“Ahora vemos a Estados Unidos pidiendo cacao, como se dice acá, y surge la expectativa del cambio en Colombia por el nuevo gobierno. Lo que era impensable se vuelve pensable. En este momento hay reuniones, secretas o públicas entre el gobierno de Biden y el de Maduro, y entre el de Petro, que está por asumir, y el de Maduro. Lo que nos preguntamos es si había que llegar tan lejos con medidas coercitivas unilaterales, bloqueos, intentos de magnicidio, dos intentos de invasión armada, actos de xenofobia, blackout eléctrico, robo de oro y de empresas, pillaje de barcos cargados de gasolina y una persecución informativa en la que el tema de conversación en todos los medios del norte global y en sus satélites latinoamericanos eran los males de Venezuela?”.  

Paréntesis noticioso: renuncia en Italia


Antes de entrar en la materia del programa, Pérez Pirela presentó una información del día: la renuncia de Mario Draghi, el primer ministro de Italia.

“Venimos diciendo hace meses que el efecto bumerán no solo lo sentirán los pueblos europeos y estadounidense, a través de mucho sufrimiento en el día a día, sino también a los gobiernos que han sancionado, boicoteado y perseguido a Rusia. Todos estos primeros ministros, presidentes y jefes de gobierno van a caer”, expresó.

En información de última hora, la tarde de este jueves (hora local), se conoció que el primer ministro de Italia, Mario Draghi, presentará su dimisión ante el presidente de la República, Sergio Mattarella.

Este tema fue reflejado así por LaIguana.TV: Italia: Primer ministro, Mario Draghi, renuncia por la crisis en su coalición de gobierno.

Según reseñaron medios internacionales, la decisión se anunció luego de que el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), principal socio del premier en el gobierno, no votó a favor de una moción de confianza en el Senado fue un decreto para combatir la inflación y que el M5S catalogara como insuficiente.

«Quiero anunciar que esta tarde presentaré mi dimisión ante el presidente de la República. La votación de hoy en el Parlamento es un hecho muy significativo desde el punto de vista político. La mayoría de Unidad Nacional que ha sostenido este gobierno desde su creación ya no existe y ha terminado el pacto de confianza que basaba la acción del gobierno», dijo Draghi en un Consejo de Ministros.

Sin embargo, horas más tarde se conoció que tras un encuentro cara a cara, el presidente Mattarella no aceptó la renuncia de Draghi y en su lugar lo instó a «comparecer ante las Cortes Generales para realizar comunicaciones, a fin de que se haga una valoración de la situación que se ha suscitado a raíz del resultado de la sesión celebrada hoy en el Senado de la República podría llevarse a cabo en su propio foro».

“Debemos explicar que el jefe de gobierno italiano es el primer ministro, quien ostenta el poder real. El presidente es un cargo netamente simbólico que no se elige por votación popular. La estabilidad de los gobiernos italianos es efímera porque las coaliciones se rompen fácilmente y los primeros ministros duran poco en el poder”, acotó el conductor del programa.

De momento, no se ha aclarado qué consecuencias tendrá esta dilación ni si implica que el premier italiano permanecerá en su posición, particularmente porque antes ya ha expresado que no gobernaría sin el respaldo del Movimiento Cinco Estrellas.

Con estos acontecimientos, Italia se suma a la lista de países cuyos gobiernos han entrado en crisis tras el inicio de la guerra en Ucrania. La semana previa, Boris Johnson fue obligado a renunciar, después de un acumulado de malestar social y escándalos de su entorno próximo, incluyendo uno de índole sexual. 

A Johnson se sumó la primera ministra de Estonia, Kalla Mallas, quien el pasado 8 de julio anunció su interés de disolver el gobierno y formar uno nuevo, eventualmente liderado por ella misma. Según datos de Euroestat, al mes de junio, el país báltico tiene una inflación anualizada de 21,9 %, de las más altas en la Zona Euro.

El 22 de junio, el Senado de Bulgaria aprobó una moción de censura contra el gobierno encabezado por el primer ministro Kiril Petkov, al que se acusa de adoptar decisiones que han agravado la situación económica en el país, duramente golpeado por la inflación.

“Todo este contexto nos sirve para ratificar nuestra hipótesis de que todos los que sancionaron a Rusia van a caer”, reiteró.

Acercamiento de Estados Unidos


Tras años de amargas relaciones con Venezuela, el gobierno de Estados Unidos parece estar dando muestras de aceptar el fracaso de su política de «máxima presión» para derrocar al gobierno del presidente Nicolás Maduro y ha buscado acercarse a Caracas con intereses muy específicos.

El movimiento responde en buena medida a la crisis del mercado energético derivada de las sanciones impuestas a los hidrocarburos rusos, pero no solamente, pues por razones externas a esta diatriba, la nación norteamericana ha visto debilitada su influencia en la región, tal y como quedó al descubierto en la recién concluida Cumbre de las Américas.

Están pasando por una crisis económica muy fuerte, con devaluación de su moneda. Están en aprietos y se acerca a Venezuela que tiene el petróleo que ellos necesitan. “La caída al foso del Partido Demócrata marcará el impulso a las aspiraciones de Trump de volver a la Casa Blanca, pero algunas encuestas indican que la mayoría de los estadounidenses no quieren ni a Trump ni a Biden”, comentó Pérez Pirela.

Agregó que el acercamiento por motivos de crisis económica hace pensar en la expresión “el amor y el interés se fueron al campo un día, y más pudo el interés que el amor que te tenía”.

Mostró El Iguanazo de Iván Lira, en el que el Tío Sam dice: “Aislar a Venezuela era una cuestión de principios, pero ahora me parece que los principios son secundarios”.

Prosiguió con el titular de LaIguana.TV en el que se señala: Exsubsecretaria de EEUU: «reuniones con Maduro envían la señal de que ya no conversamos con la oposición”.

La exsubsecretaria de Estado de Estados Unidos para Venezuela y Cuba, Carrie Filipetti, aseveró que enviar funcionarios de alto nivel de la Casa Blanca y embajadores a reunirse con el presidente Nicolás Maduro y no con Juan Guaidó, podría interpretarse como que las conversaciones bilaterales ya no son con la oposición sino con el gobierno del presidente Maduro.

“Lo último que supimos de reuniones de la gente de Biden con la de Guaidó fue con la esposa del autoproclamado. No creo que ni él ni ella, y vaya mis respetos para ella en tanto que dama, puedan suministrarle petróleo a Estados Unidos”, glosó el moderador.

La exfuncionaria, quien ejerció su cargo durante el mandato de Donald Trump, destacó en una entrevista con BBC aparecida este miércoles, que lo anterior es una consecuencia del fracaso de la «excesiva confianza» que le dio la administración estadounidense a la derecha local para «sacar» del poder a Maduro.

Filipetti opinó que el gobierno de Joe Biden reconoció que el gobierno venezolano quiere negociar las sanciones estadounidenses, razón por la cual debió matizar las posturas extremistas que se adoptaron durante la presidencia de Donald Trump y que fallaron.

Recalcó que el exdiputado Juan Guaidó figuró en la estrategia de Trump y del actual presidente estadounidense, Joe Biden, hasta que se desató la actual crisis energética.

«Llevar a funcionarios de alto nivel de la Casa Blanca y a nuestros embajadores a Venezuela y que se reúnan con Maduro, envía una señal de que nuestras conversaciones ya no son con la oposición», indicó Filipetti.

Por su lado, John Bolton, quien sirvió como asesor de seguridad nacional de la administración Trump, reconoció esta semana en una entrevista con CNN que su país planeaba golpes de Estado en el mundo y se refirió concretamente al caso venezolano, en el que admitió que su gobierno había fracasado, a pesar de haber apoyado ampliamente a la oposición local.

Desde otro ángulo, el analista colombiano Juan Alberto Sánchez valora que la política de «máxima presión adelantada por la Casa Blanca para deponer al gobierno bolivariano fracasó, aunque no descarta que las restricciones sobre la economía venezolana se mantengan, visto el poder que tienen ciertos grupos antivenezolanos en los Estados Unidos.

Los detalles del último de estos encuentros, que tuvo lugar el pasado 27 de junio, se mantuvieron a resguardo de la opinión pública, pero el presidente Nicolás Maduro aseguró en una transmisión televisada que se daría continuidad a los temas de la agenda bilateral abordados en la reunión del pasado 5 de marzo, entre los que figuró la crisis energética.

En ese orden, Maduro comentó que en el marco de la Cumbre del G-7, el presidente francés, Emmanuel Macron, pidió a Biden que se levantaran las sanciones sobre Venezuela e Irán para que su crudo pudiera comerciarse en el mercado mundial. Maduro aclaró que esa denominación es imprecisa porque Venezuela fue excluida del mercado occidental, mas no del global, pues sigue vendiendo sus hidrocarburos a otras naciones del orbe.

“Más claro no canta una iguana porque aparte del mercado estadounidense y europeo hay unos pequeños países por ahí, como China y Rusia, que son parte de nuestro mercado”, ironizó Pérez Pirela.

A mediados de mayo, Venezuela confirmó que Washington alivió muy parcialmente las medidas coercitivas unilaterales impuestas sobre la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa, por sus siglas), al permitirle a ciertas compañías negociar y reiniciar operaciones en el país.

Sin embargo, Caracas aclaró que estas decisiones apenas representan una porción muy pequeña de todas las sanciones que pesan sobre su industria petrolera e insistió en que la Casa Blanca debe levantarlas todas, no solo porque están fuera del Derecho Internacional, sino también porque perjudican al pueblo venezolano todo, como ya se ha demostrado hasta la saciedad.

Según cálculos oficiales, desde que arreciaron las sanciones en 2019, Venezuela dejó de percibir 140.000 millones de dólares –equivalente al PIB de Kuwait, por ejemplo–, que en un momento representaron cerca del 99 % de todos sus ingresos.

Tras reiterar los anteriores datos, Pérez Pirela subrayó que “hay que levantar las sanciones”, y señaló que pese al innegable daño económico y aunque las cifras difieren considerablemente entre sí, todas las instituciones financieras internacionales han proyectado que el país crecerá este año, mientras Europa está revisando a la baja sus previsiones de crecimiento.

A inicios de junio, el gobierno venezolano anunció un crecimiento cercano al 5 %, principalmente por causa del alza de los precios de los ‘commodities’ energéticos e incluso a pesar de las 502 sanciones que afectan directamente el negocio petrolero nacional.

Al conocerse del alivio parcial de las restricciones, agencias de noticias internacionales precisaron que entre las compañías beneficiadas se encontraba la estadounidense Chevron, pero no solamente. El arribo de un buque fletado por la italiana Eni a un puerto de carga en el oriente del país a mediados de junio, agregó a esta empresa –relevante dentro del mercado energético europeo– a la lista de autorizados a transacciones con el estado venezolano y es un indicio claro de que Estados Unidos recurrió a Venezuela para auxiliar parcialmente a sus socios europeos, muy perjudicados por las sanciones impuestas a los energéticos rusos. 

En Laiguana.TV este tema se presentó con el titular: ¿Buque petrolero italiano que llegó a Venezuela confirma el giro de las sanciones gringas?

Un informe publicado por la cadena RT refiere que «la llegada a aguas venezolanas del buque griego Aframax Minerva Zoe, de bandera griega y fletado por la petrolera italiana Eni, era la prueba que se requería para corroborar que los rumores sobre una inminente relajación de las sanciones por parte de Estados unido a Venezuela eran ciertos».

«Con ello se verifica que las informaciones que circulan en este sentido son reflejo del creciente proceso de desmantelamiento de la política trumpista de ‘máxima presión’ sobre el país suramericano», puntualiza el trabajo periodístico, en el que también se resalta que ya no son solo declaraciones de voceros de la Casa Blanca, sino hechos concretos que dan cuenta del cambio de postura en Washington.

Por si ello no bastara, el pasado 7 de julio, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos extendió una licencia que permite a Pdvsa exportar gas licuado –recurso muy escaso ahora mismo en Europa– hasta julio de 2023.

Empero, en el texto del comunicado con el que se informó la decisión, se matiza que dicha «licencia general no autoriza cualquier pago en especie de petróleo o productos derivados del petróleo; o cualquier transacción o actividad prohibida por el reglamento de sanciones a Venezuela».

Las proyecciones económicas venezolanas no contemplaban este escenario, que sin dudas redundará en más ingresos para la nación, necesarios para financiar otras áreas de la actividad económica, así como planes y proyectos sociales, como apuntara en entrevista exclusiva con LaIguana.TV el diputado Ángel Luis Rodríguez, presidente de la Comisión de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional.

Estas acciones estadounidenses también desmontan la falsa idea de que la industria petrolera venezolana se encuentra en unas condiciones que le impiden operar con la eficiencia que demanda el mercado energético mundial, trastocado por causa de la imposición de sanciones a Rusia.

A tal respecto, el ingeniero e investigador petrolero Miguel Jaimes, manifestó en entrevista exclusiva con Laiguana.TV que históricamente, Venezuela ha jugado el rol de proveedor seguro de hidrocarburos para las potencias occidentales.

Aunque admitió que es verdad que la industria ha sufrido por causa de las sanciones y por bajas de personal calificado, insistió en que sí tiene la capacidad para reinsertarse por la larga tradición de explotación petrolera presente en el país.

Jaimes sostuvo que además de la capacidad instalada –técnica y humana–, entran en juego el levantamiento de algunas las coerciones estadounidenses, por lo que en su juicio, Pdvsa y sus filiales viven «su mejor momento» desde 2016.

“No puedo dar detalles, pero a esta hora hay actividades muy importantes en las refinerías venezolanas para ponerse al día, en beneficio de la producción de derivados”, reveló Pérez Pirela.

¿Cómo queda Guaidó con el acercamiento EEUU-Maduro?


El petróleo puso al descubierto el rol real que este señor Guaidó tiene actualmente en Venezuela. Hay que estar en Venezuela para darse cuenta de que Guaidó no existe en términos políticos ni en la política nacional ni en la opositora ni en su propio partido”, aseveró.

Este cambio de tornas en la interlocución de Washington con Venezuela tiene todavía más implicaciones. Como apuntara la exsecretaria de Estado estadounidense Carrie Filipetti en su extensa conversación con BBC, el exdiputado Juan Guaidó fue definitivamente descartado por el gobierno de Joe Biden cuando el mercado energético entró en crisis.

Sin embargo, es claro que pese al aparente apoyo irrestricto de la Casa Blanca, el declive del Guaidó en las arenas internacionales controladas por Estados Unidos no se concretó en las últimas semanas o meses.

En enero de 2021, una vez se instaló la Asamblea Nacional electa en diciembre de 2020, la Unión Europea lo rebajó de «presidente interino» a «interlocutor privilegiado» de la oposición y la frase «reconocido por más de 60 países» repetida incesantemente en la gran prensa dejó de tener sentido, pese a que la cifra había menguado significativamente desde enero de 2019, cuando tales anuncios se hicieron públicos. 

“Ahora solo tiene el respaldo de un puñado de países que lo siguen defendiendo porque se han apropiado de nuestro oro o nuestras empresas”, alegó.

La administración Biden pudo haber aprovechado su condición de anfitrión en la IX Cumbre de las Américas para darle un espaldarazo público, pero se abstuvo de hacerlo y en su lugar tampoco invitó al gobierno venezolano –con el que se había reunido semanas atrás en Caracas–, con la excusa de que es «una dictadura».

La débil posición del exparlamentario en Washington quedó al plenamente descubierto, cuando al ser increpada por una periodista venezolana residenciada en los Estados Unidos sobre la ausencia de Guaidó en la cita continental, la presidenta de la Cámara de Representantes del Congreso estadounidense, Nancy Pelosi, manifestó que no sabía de quién le hablaba.

Adicionalmente –y a contrapelo de la insistencia de una parte de la prensa hegemónica– el Parlamento venezolano electo en 2020 cuenta del reconocimiento de la mayoría de los países, que han entendido que la legislatura anterior ya cesó sus funciones y que a Juan Guaidó no le asiste ningún derecho para autoproclamarse como presidente de Venezuela o extender sus funciones como diputado.

Tanto es así, que el Jorge Rodríguez, actual presidente del legislativo venezolano, fue electo recientemente por unanimidad como vicepresidente para América Latina de la Red Parlamentaria del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal) hasta 2025.

Aunque vivió horas bajas tras el fin de la Guerra Fría, el bloque agrupa a 120 países del sur global, más 15 miembros observadores, incluyendo algunos de América Latina como Argentina, Brasil, México y Uruguay.

A esto se agrega que con la victoria de Gustavo Petro en Colombia, Guaidó perdió a su aliado más cercano, pues en los cuatro años de gestión de Iván Duque, el vecino país devino en la principal plataforma de desestabilización contra Venezuela.

En suelo colombiano residen varios operadores del ala de la oposición alineada con el autoproclamado presidente interino. Además, según reportes ya comprobados, desde ese país –y con la venia de su gobierno– se tramaron acciones sediciosas que incluyeron dos intentos de incursión armada, uno en febrero de 2019 y otro en mayo de 2020.

Petro, en contraste, prometió durante su campaña electoral que reanudaría los lazos con Venezuela independientemente de quien ostentara el poder político, bajo el argumento de que las dos naciones tienen una agenda común que sacar adelante, que incluye a millones de personas que habitan en las zonas fronterizas y a los migrantes de las dos nacionalidades. 

La reactivación de la relación colombo-venezolana


Por otro lado, el gobierno de Gustavo Petro en Colombia, que se instalará el próximo 7 de agosto, ya ha anunciado que aspira regularizar los nexos con Venezuela, rotos desde 2019 por el respaldo del presidente Iván Duque al autoproclamado Juan Guaidó y al gobierno paralelo que pretendió instalar con la venia estadounidense del inefable Donald Trump.

Si bien Petro se ha presentado como un duro crítico de Maduro y su administración, también ha puesto el acento en la importancia de reactivar el comercio transfronterizo y las relaciones consulares, aspectos de vital importancia para las dos naciones bolivarianas y sobre los que ya hay algunos avances concretos.

Estos dichos dejan claro que el mandatario electo no está dispuesto a mantener a Colombia como punta de lanza de las acciones desestabilizadoras contra el gobierno venezolano, tal y como hizo su predecesor. 

Presentó el segundo Iguanazo de la noche, una caricatura que muestra a Gustavo Petro, con un celular en la mano, diciendo: “Aló, presidente Maduro: ¡vamos a normalizar las relaciones porque ya el anormal se va!”.

Petro demostró que no hablaba en balde cuando pronunció declaraciones a la revista Semana en diciembre de 2021, mucho antes de que se materializara su victoria en las urnas, pues no solo no contactó a Juan Guaidó, sino que apenas dos días después de su éxito electoral, llamó al presidente venezolano, Nicolás Maduro, y lo informó en sus redes sociales.

La conversación también fue referida por Maduro, quien además aportó que la conversación había girado en torno a la regularización de la situación fronteriza y «diversos temas».

Posteriormente, Petro añadió en una entrevista que concediera la revista Cambio –la primera como presidente electo–, que otro de los temas en discusión con su homólogo venezolano había sido la situación de la empresa venezolana Monómeros Colombo Venezolanos, vista su relevancia para el agro de su país.

El pasado 5 de julio, el mandatario se refirió nuevamente a esto y si bien no aclaró si su administración la devolverá al Estado venezolano como corresponde, sí indicó que estaba dispuesto a revisar el estatus legal de la empresa, que fue intervenida por Supersociedades Colombia a finales de 2021 por presunto riesgo de quiebra.

“La verdad es que se la robaron dos veces: primero se la repartieron entre cuatro partidos políticos venezolanos, y luego se la dejaron a la gente de Duque”, resumió.

«¿Para qué queremos a Monómeros? No es para entregársela a un funcionario público colombiano para que la privatice y se quede con esa empresa. Queremos a Monómeros es si se puede mantener la traída de la úrea a precios módicos, como era antes, y, por tanto, poderle bajar los precios a los fertilizantes», expresó Petro en una conversación con W Radio.

En un debate entre candidatos presidenciales, Petro criticó la política de Iván Duque hacia la otrora lucrativa compañía venezolana e incluso lo acusó de habérsela «regalado» a Juan Guaidó para que se la robara.

Investigaciones realizadas por el portal de periodismo de datos abiertos La Tabla durante tres años, han dado cuenta de los múltiples manejos dolosos a los que ha estado sometida la productora de fertilizantes desde que es administrada por agentes designados por Guaidó.

Entre los hallazgos reportados por este medio venezolano en sus numerosos informes destacan la posible implicación de personeros del gobierno de Duque en la implosión de Monómeros y el interés de clanes político-económicos del Caribe colombiano ligados al uribismo en hacerse con el control de la empresa.

Por ello, aunque todavía no está claro qué acciones concretas emprenderá para que la filial venezolana aumente sus niveles producción ni tampoco cómo se abordará su dudoso estatus jurídico, sí es evidente que este es uno de los asuntos que reviste de mayor interés para Petro en su relacionamiento con las autoridades venezolanas.

Dada la complejidad e incluso, el eventual conflicto de intereses que podrían originarse al respecto, el gobierno del Pacto Histórico se ha enfocado públicamente en dar muestras de que el interés de rehabilitar la relación comercial fronteriza con Venezuela no era una promesa demagógica formulada al calor de una campaña electoral.

Así las cosas, este 13 de julio, el recién designado ministro de Hacienda de Colombia, José Antonio Ocampo, aseguró que la reapertura de la frontera colombo-venezolana representa «una oportunidad enorme» para ambos países, llegara a concretarse.

El titular de Laiguana.TV al respecto reza: Ministro de hacienda de Petro: reapertura de la frontera representa «una oportunidad enorme si se logra”.

En una entrevista con The Associated Press, Ocampo manifestó que había que recordar que Venezuela era el «segundo socio comercial» de Colombia y aunque condicionó el éxito de las operaciones a la reactivación económica al otro lado de la frontera, admitió que «este es el primer año en donde hay una expectativa de crecimiento de la economía venezolana».

Por su lado, el gobernador del fronterizo estado Táchira, Freddy Bernal, aseguró el pasado 4 de julio que la próxima reapertura de la frontera colombo-venezolana, cerrada al comercio desde 2019, traerá beneficios comerciales cercanos a los 4.000 millones de dólares para el comercio bilateral e impactará positivamente el empleo en la zona.

«Habría una activación de unos cuatro mil millones de dólares, generando en principio unos tres mil empleos directos en Venezuela, con proyección de unos veinte mil en los próximos cuatro años», expresó Bernal en un encuentro con empresarios de los dos países, celebrado en San Cristóbal, capital de la entidad.

Otro de los asuntos de los que Petro ha prometido ocuparse en su relacionamiento con Venezuela, es el control de los grupos irregulares armados que operan a lo largo de la extensa frontera común.

Otra nota de Laiguana.TV se titula: Gustavo Petro: una de las prioridades será combatir a grupos ilegales en la frontera con Venezuela

A inicios de julio, en una entrevista con una radio local, Petro aseguró que como parte de la recuperación del comercio fronterizo, había que «correr, arrinconar y desalojar a los grupos armados que hoy están al lado y lado de la frontera de carácter ilegal».

En la misma línea, el mandatario electo destacó que estas acciones requieren del trabajo conjunto entre los dos países, pues de otro modo no será posible que se reactive la relación comercial en la zona, especialmente la que adelantan pequeños productores locales.

«Una vez tomemos el gobierno el 7 de agosto, acabada la posesión, empezaremos a construir las instituciones que existían antes: había unas de tipo económico, político y diplomático», afirmó.

En conversación con Laiguana.TV, Juan Eduardo Romero, diputado a Asamblea Nacional de Venezuela e investigador de la relación bilateral, aseguró que la regularización del intercambio comercial es un punto de coincidencia entre el gobierno venezolano y el colombiano que asumirá el próximo 7 de agosto.

Entre las razones aportadas por Romero destacan la larga historia comercial entre las dos naciones, que se remontan al tiempo de la colonia, así como la necesidad de frenar las transacciones irregulares en la zona, que en sus cálculos ascienden a 30.000 millones de dólares y que sirven para financiar al paramilitarismo y la desestabilización.

Del lado venezolano, desde marzo de 2021, el Ejecutivo asumió un rol más proactivo en el control de la zona fronteriza y el combate sin tregua de grupos irregulares armados procedentes del vecino país.

En los últimos años, la situación se desbordó por una combinación entre la desatención de la administración de Iván Duque al problema, las guerras intestinas entre distintas formaciones que participan del conflicto armado y el contacto de cárteles del narcotráfico colombiano con bandas criminales urbanas para establecer nuevas rutas destinadas al trasiego de cocaína.

De acuerdo con informaciones oficiales, desde entonces el gobierno venezolano ha informado del desmantelamiento de numerosos campamentos improvisados, de la incautación y destrucción de decenas de armas y artefactos explosivos, del derribo de avionetas presuntamente empleadas para el tráfico de drogas, así como de la inhabilitación de pistas clandestinas en zonas aisladas de municipios fronterizos. 

Los cambios en la política de la Casa de Nariño hacia Venezuela se están haciendo sentir en otra esfera sensible: la migración. Según informara este jueves Daniel Rojas, coordinador del empalme del gobierno electo, del Pacto Histórico promoverá el retorno voluntario de los venezolanos a su país.

«Queremos brindarle a los migrantes, especialmente a los venezolanos, pero a toda clase de migrantes en el país, que tengan garantía de derechos y uno de sus derechos es que si voluntariamente es de su deseo retornar a sus lugares de origen, pues lo puedan hacer», dijo el funcionario.

Rojas enfatizó que este paso dependerá de la normalización de las relaciones diplomáticas entre las dos naciones y en ese orden adelantó que en las conversaciones que las partes sostengan a tal fin, «necesariamente» tendrán que incluirse «este tipo de derechos, que son derechos humanos».

“Es trascendental el tema de la reapertura de la frontera, del reinicio de las relaciones diplomáticas, consulares, comerciales, políticas con un vecino con quien compartimos una frontera extensa y porosa, y no se trata de los gobiernos sino del impacto en toda una población en varios estados. Se juega con la vida de millones de venezolanos, colombianos y colombo-venezolanos –concluyó Pérez Pirela-. Esos 30 mil millones de dólares de los negocios ilegales van al paramilitarismo, las mafias y la desestabilización, es decir, en contra de ambos pueblos. Reabrir la frontera es una necesidad humana, ni siquiera humanitaria, un acto mínimo de respeto por las lógicas propias, la ecología propia, las dinámicas propias de dos pueblos ligados no desde hace 50 años, sino con unas relaciones milenarias”.

Dos millones de visitas

Pérez Pirela, también director de Laiguana.TV, informó que el portal acumuló casi dos millones de visitas durante el pasado mes de junio. “La afluencia de casi 500 mil personas marcan el liderazgo de Laiguana.TV en Venezuela, según SimilarWeb, uno de los más reputados rankings mundiales. Esta es una prueba de que sí se puede con calidad, con creatividad y con inteligencia hacer medios de comunicación alternativos, autónomos y leales. Esto nos llega de orgullo”.

Materiales audiovisuales difundidos
En el programa se difundieron los siguientes materiales audiovisuales:

-Video de Al Mayadeen: John Bolton confiesa participación en golpes de Estado

-Video de Nexo Latino: Comentarios del analista Juan Alberto Sánchez

-Video de Tienes que verlo: declaraciones del presidente Nicolás Maduro

-Video de teleSUR: Gobierno venezolano espera levantamiento de sanciones impuestas por EEUU

-Video de En la pista: ¿Cuánto se beneficiará Venezuela con la exportación de gas?

-Video de Cara a cara: Entrevista con Miguel Jaimes.

-Video de cuenta Twitter: Nancy Pelosi

-Video de En la pista: ¡Guaidó quedó fuera del escenario internacional! 120 países reconocen al Parlamento de Venezuela

-Tuit del presidente Nicolás Maduro

-Video de cuenta Twitter: declaraciones de Gustavo Petro

-Video de Cara a cara: entrevista con Juan Eduardo Romer

(LaIguana.TV)