El Gobierno peruano prorrogó este sábado, por 60 días, el estado de emergencia en ocho distritos de la región sureña de Arequipa para continuar con la rehabilitación de las casas y vías afectadas por un terremoto de magnitud 5,1 que golpeó esa zona en marzo pasado, pero no dejó fallecidos.

El decreto supremo que dispone la extensión del estado de emergencia precisó que estará vigente en los distritos de Cabanaconde, Ichupampa, Madrigal, Maca, Tapay, Achoma y Lari, en la provincia de Caylloma, a partir del 25 de julio.

En ese sentido, el gobierno regional de Arequipa y los gobiernos locales comprendidos, además de la coordinación técnica del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), continuarán con las medidas y acciones de excepción necesarias para la rehabilitación de esas localidades.

Los ministerios de Vivienda, Interior y Defensa también participan en las acciones dispuestas y el financiamiento corre a cargo del presupuesto de las entidades comprometidas.

El movimiento telúrico se produjo el 24 de marzo pasado a las 19.56 horas locales (24.56 GMT) con epicentro a 11 kilómetros al sureste de Cabanaconde, a una profundidad de 130 kilómetros, según reportó el Instituto Geofísico del Perú (IGP).

El sismo se sintió con una intensidad III en Cabanaconde, que pertenece a una de las regiones más sísmicas del país.

Una semana antes, Caylloma se había visto sacudida por una sucesión de 19 sismos en un día, el más fuerte de 5,5 de magnitud, que dejó un centenar de casas sepultadas pues la mayoría fueron construidas con ladrillos de barro.

El alcalde del distrito de Maca, Sixto Rojas, lamentó que la iglesia de la localidad, que era su patrimonio cultural, también resultara resquebrajada y esperaban la ayuda del gobierno regional para asistir a las familias afectadas.

Perú está ubicado en el llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, donde se produce el 80 % de la actividad sísmica a nivel global.

(EFE)