El Reino Unido impuso nuevas sanciones contra Rusia, que incluyen a varios jefes de las regiones del país y a los altos titulares de las Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL).

En particular, las sanciones afectan a los gobernadores de las regiones rusas de Tiumén, Briansk, Kursk, Nizhni Nóvgorod, Sverdlovsk, Cheliábinsk y Samara, así como al jefe del Gobierno de la RPD, Vitali Jotsenko, y al vicepresidente primero del Gobierno de la RPL, Vladislav Kuznetsov.

Según el comunicado, tanto Jotsenko como Kuznetsov participan y apoyan «políticas y acciones que desestabilizan a Ucrania y socavan o amenazan su integridad territorial, su soberanía o su independencia».

Las sanciones incluyen la congelación de activos y la prohibición de viajar al territorio del Reino Unido.

El 21 de julio el Reino Unido activó la prohibición de importar oro desde Rusia y adelantó una restricción similar respecto al carbón y el petróleo.

También se prohíbe la prestación de asistencia técnica, servicios y fondos financieros y servicios de intermediación relacionados con estos bienes.

Numerosos países condenaron la operación militar que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó lanzar el pasado 24 de febrero tras haber recibido la petición oficial de las Repúblicas de Donbás para proteger a las personas que han sido sometidas a abusos y al genocidio del régimen de Kiev durante ocho años.

Muchas naciones activaron varias baterías de sanciones individuales y sectoriales que buscan elevar el costo del conflicto para Moscú.

El 20 de julio el canciller ruso, Serguéi Lavrov, señaló que el potencial de las sanciones antirrusas se ha agotado.

(Sputnik)