La administración de Joe Biden habría decidido condicionar la emisión de una licencia ampliada de operación en Venezuela a la petrolera Chevron a la reanudación de las conversaciones entre el Gobierno venezolano y el sector de la oposición aglutinado en la así llamada Plataforma Unitaria, reseña Reuters citando a tres personas familiarizadas con la situación.
Siempre siguiendo esta versión, Chevron acudió al Departamento del Tesoro para solicitar un relajamiento de las medidas coercitivas unilaterales impuestas contra Venezuela, tras haber suscrito un acuerdo técnico con Pdvsa, «lo que le permitiría a la compañía tomar el control operativo y tener una mayor participación en las adquisiciones y el comercio en las cuatro empresas petroleras que comparte con Pdvsa».
Empero, el Departamento de Estado frenó las intenciones de la trasnacional, al apuntar que solo habrá cambios significativos en la política de sanciones contra el país suramericano si el presidente Nicolás Maduro accede a retomar el diálogo y «toma medidas concretas» para realizar lo que Washington denomina «elecciones libres».
De acuerdo con la agencia, la solicitud interpuesta por Chevron quedó atrapada en las diatribas de la política interior estadounidense de cara a las elecciones de mitad de período, que se celebrarán el próximo mes de noviembre y en ese escenario, tanto la oficina de Antony Blinken como el Congreso estarían opuestas a tomar cualquier medida que «beneficie» al Gobierno de Venezuela.
En el trabajo periodístico se sostiene que Chevron no formuló comentarios sobre este asunto.
Una persona en Washington con conocimiento de la situación manifestó a Reuters que el gobierno del presidente Joe Biden ha considerado seriamente la solicitud de Chevron, debido a los efectos combinados de las sanciones a los hidrocarburos rusos y la reducción de oferta anunciada por la OPEP+.
Más allá de los juegos de tronos en el escenario preelectoral estadounidense, expertos vinculados con la oposición venezolana citados en el informe periodístico, estiman que la propuesta de Chevron podría suponer una violación a la legislación local, que prohíbe explícitamente que una firma extranjera controle cualquier compañía mixta.
Sin embargo, el ministro de Petróleo de Venezuela, Tareck el Aissami, aseguró el pasado agosto que los pasos que se dieran para el relanzamiento de las operaciones de Chevron en el país, dependen exclusivamente de lo que haga el gobierno de Biden.
«Hemos discutido y acordado con ellos todo lo relacionado con la restitución inmediata de las operaciones. Pero ya no depende de nosotros. La pelota está en la cancha del gobierno de Estados Unidos», dijo entonces.
Reuters valora que «una eventual licencia ampliada para Chevron es la principal herramienta de negociación de Washington para poner en marcha las conversaciones políticas», porque «el permiso ayudaría a restaurar la industria petrolera de Venezuela, donde la producción se ha estancado, y es la mejor esperanza de Chevron de recuperar miles de millones de dólares en deuda impaga».
Representantes de la oposición se reúnen con el gobierno de EEUU
De otro lado, fuentes del Gobierno de Joe Biden dijeron a Reuters que el jefe de la delegación de la Plataforma Unitaria, Gerardo Blyde, se reunió este martes en la capital estadounidense con Brian Nichols (vocero del Departamento de Estado), Juan González (asesor principal de políticas de la Casa Blanca) y James Story, diplomático para «asuntos de Venezuela».
En el encuentro habrían participado «al menos otros cinco representantes de la oposición venezolana» cuyos nombres no se divulgaron.
Aparentemente, además de discutir sobre la necesidad de reactivar la mesa de diálogo en México, el grupo habría considerado evaluar opciones para disponer de fondos del Estado venezolano retenidos en cuentas de bancos europeos y destinarlos a la «ayuda humanitaria».
Un portavoz del Departamento de Estado comunicó a Reuters que Nichols, los otros funcionarios estadounidenses y los representantes de la oposición venezolana intercambiaron pareceres sobre «el progreso en el regreso a las negociaciones con ‘el régimen de Maduro’ en la Ciudad de México y la actual crisis humanitaria, política y económica en Venezuela».
El diálogo real: Venezuela y EEUU
Muy al margen de toda esta dinámica queda el exdiputado Juan Guaidó, quien a pesar de ser reconocido por la Casa Blanca como «presidente interino de Venezuela», no fue considerado en las negociaciones con Chevron y pidió explicaciones al Departamento de Estado a través de una carta.
Esto se ha hecho particularmente notorio desde inicios de marzo, cuando una delegación de alto nivel llegó a Caracas para conversar con Maduro. Diversos informes aseveraron que hubo negociaciones para el intercambio de prisioneros y que el tema petrolero se puso sobre la mesa.
El primer punto produjo resultados concretos que recibieron en su día importante atención mediática, mientras que los intercambios sobre las condiciones de reingreso de Venezuela al mercado occidental de hidrocarburos aún no parecen estar claras, pues Estados Unidos no parece haber abandonado su estrategia de cambio de régimen.
En ese orden, Reuters indica que «el tema más difícil, unas elecciones presidenciales libres y transparentes que podrían reemplazar a Maduro, permanece prácticamente intacto y el equipo de Guaidó se siente cada vez más excluido de las discusiones entre los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela».
Tas un aparente pacto entre las fracciones opositoras para elegir su candidato presidencial en elecciones primarias el venidero junio de 2023, celebrado recientemente en Panamá, Washington aspira que la Ciudad de México pueda convertirse en un escenario para abordar el tema electoral.
Sin embargo, Reuters advierte que el jefe de la representación gubernamental, Jorge Rodríguez, no se ha comprometido con ninguna fecha para retomar las conversaciones con la Plataforma Unitaria, ni en México ni en otro lugar.
Entretanto, el tiempo se agota para Chevron. Su última –y muy limitada– licencia de operación en Venezuela expirará la medianoche del 30 de noviembre y todavía no está claro si será renovada o ampliada.
(LaIguana.TV)
