La exprimera ministra del Reino Unido Liz Truss habría enviado un mensaje con la frase: «Está hecho» al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, inmediatamente después del ataque a los ramales del Nord Stream. Desde la Cancillería rusa esperan una explicación de Londres, agregando que «millones de personas están esperando la respuesta».

«Liz Truss utilizó su iPhone para enviar un mensaje al secretario [de Estado de EEUU, Antony] Blinken diciendo ‘está hecho’ un minuto después de que el gasoducto explotara y antes de que nadie más lo supiera», escribió fundador de los sitios web Megaupload y Mega, Kim Dotcom, en su cuenta de Twitter con casi millón de seguidores.

Agregó que este mensaje es la razón por la que Rusia cree que el Reino Unido estuvo involucrado en el sabotaje al gasoducto Nord Stream. Dotcom, que nació como Kim Schmitz en Alemania occidental, sugirió que los datos se obtuvieron a través de un hackeo de iCloud.

Al mismo tiempo, bromeó que «no solo una alianza de inteligencia Cinco Ojos tiene el acceso a todas las bases de datos de Big Tech» y le sorprendió que los funcionarios del Gobierno con autorización de máxima seguridad usaran iPhones en lugar de teléfonos emitidos por la Agencia de Seguridad Nacional o por el Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno (GCHQ, por sus siglas en inglés).

La portavoz de la Cancillería de Rusia, María Zajárova, por su parte, escribió que está esperando la repuesta de Londres sobre el mensaje de Liz Truss.

«Francamente dicho, me da igual quién y cómo obtuvo esa información. Me interesa la respuesta de Londres a la siguiente pregunta: ¿Envió la primera ministra del Reino Unido, Liz Truss, al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, directamente después de la explosión en Nord Stream un mensaje con las palabras ‘it’s done’ [está hecho]?», escribió Zajárova en su canal de Telegram.

La diplomática señaló que «millones de personas de todo el planeta están esperando la respuesta oficial a esta pregunta».

El 29 de octubre, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que los oficiales de la Armada británica participaron en la planificación, apoyo e implementación del ataque terrorista para socavar los gasoductos Nord Stream.

El pasado 26 de septiembre, la empresa Nord Stream 2 AG, operadora del gasoducto homónimo ruso, informó de una fuga de gas provocada por causas desconocidas en una de las dos tuberías de la infraestructura cerca de la isla danesa de Bornholm. Más tarde trascendió que las dos líneas del gasoducto paralelo Nord Stream 1 también habían sido dañadas.

El Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia catalogó las explosiones de ataques terroristas y el 30 de septiembre desveló la posesión de evidencias que apuntaban a la implicación de determinados países occidentales. La Fiscalía General rusa abrió una investigación por terrorismo internacional tras los daños a las dos tuberías en una zona del mar Báltico.

(Sputnik)