El partido de los cuartos de final del Mundial 2022 de este sábado entre Marruecos y Portugal enfrentará a la mejor defensa, con tan solo un gol en contra en cuatro encuentros del conjunto africano, contra el mejor ataque, con doce tantos de la selección lusa, igualada en ese apartado con Inglaterra, ambos después de cuatro duelos jugados en la competición, en los que el conjunto dirigido por Fernando Santos promedia dos goles cada tres remates entre los tres palos.

Nada más Túnez, que fue eliminada en la primera fase, también con una diana en su contra, ha encajado tan pocos goles en Qatar 2022 como Marruecos, que se sostuvo imbatida en tres de sus cuatro choques.

Al 0-0 con el que empezó el torneo contra Croacia (también presente en cuartos de final), cuando tan solo permitió dos tiros a su portería entre los tres palos, le siguió el 0-2 con el que se impuso a Bélgica, cuando recibió cuatro disparos a su marco, y el 1-2 frente a Canadá.

En ese último partido, en el minuto 40, en propia puerta de Nayed Aguerd, sufrió el único gol en contra que ha recibido Marruecos hasta ahora en el Mundial 2022, aunque, por entonces, ya manejaba el marcador frente al combinado norteamericano por una diferencia de 0-2. No hubo ningún tiro entre los tres palos de su portería de ningún jugador rival en los 90 minutos jugados.

En toda esa secuencia de resultados, Marruecos jamás ganó la posesión a su rival, siempre por debajo del 40 por ciento en todos los encuentros: el 32 contra Croacia y Bélgica, el 36 frente a Canadá y nada más el 22 ante España, a la que aguantó con el 0-0 para luego doblegarla en la tanda de penaltis por 3-0.

«Estoy orgulloso de ellos. Si me hubiesen comentado antes del Mundial que superaríamos a Bélgica, Croacia, Canadá y España encajando solo un gol… Tenemos un grupo increíble», explicó Walid Regragui, seleccionador de Marruecos.

Enfrente, Portugal es letal en el aspecto ofensivo. La demostración de poder contra Suiza, a la que sobrepasó de principio a fin en los octavos de final con una goleada sonora por 6-1, reafirmó todo el potencial de las individualidades y del colectivo luso, que ha marcado doce goles en cuatro encuentros de la competición, a una media de tres por duelo, que sólo alcanza a igualar Inglaterra, que también está en cuartos y que se enfrenta a Francia.

El conjunto de Fernando Santos marcó tres goles en su victoria contra Senegal (3-2), dos en su triunfo frente a Uruguay (2-0), uno en la derrota ante Corea del Sur (2-1) y seis en los octavos ante Suiza (6-1), pero, sobre todo, esos números se realzan por la efectividad: para conseguir los doce tantos, Portugal sólo necesitó 20 tiros a portería. Son dos goles cada 3,2 remates.

Sus dianas en Qatar 2022, a la vez, las reparte entre ocho jugadores: tres las ha firmado Gonçalo Ramos, con la duda de si repetirá como titular ante Marruecos o si Fernando Santos repondrá ahí a Cristiano Ronaldo; dos son de Bruno Fernandes y Rafael Leao; y una de Joao Félix, Cristiano Ronaldo, Raphael Guerreiro, Pepe y Ricardo Horta.

Salvo Inglaterra, nadie alcanza los números goleadores hasta ahora de Portugal. Ni Francia ni España, con nueve; ni Países Bajos, con ocho; ni Brasil ni Argentina, con siete.

MARRUECOS – PORTUGAL

Entre la duda aún de la titularidad de Cristiano Ronaldo, en el debate entre el regreso al once o la repetición de la suplencia, con todo lo que eso despierta en un partido tan decisivo, Portugal y Marruecos exponen su ilusión y comprueban su realidad en el duelo de cuartos de final del Mundial 2022, un nuevo desafío para Yassine Bono, Achraf Hakimi y la revelación de Qatar contra las expectativas de Joao Félix, Bruno Fernandes, Bernardo Silva…

En torno al atacante luso, a la vorágine en la que se mueve cada día todo lo que acontece a su alrededor, Portugal cierra filas. «Dejad a Ronaldo en paz», pidió este mismo viernes Fernando Santos, su seleccionador, en la rueda de prensa de la víspera del duelo más importante en un Mundial para Portugal desde 2006, la última vez que fue más allá de los cuartos de final, cuando terminó en la cuarta posición, cuando CR7 debutaba en el torneo.

«Cristiano nunca me dijo que quisiera irse», remarcó el técnico para zanjar el asunto que ha marcado las últimas horas, después de que el diario ‘Récord’ aseguró que Cristiano había amenazado con marcharse cuando conoció su suplencia en el encuentro de los octavos de final frente a Suiza.

Cristiano siempre ha estado en el foco en el Mundial. Primero por sus palabras para forzar su salida del Manchester United; después porque es el único jugador en la historia en golear en cinco Mundiales, con el tanto de penalti con el que batió la portería de Ghana en la primera jornada; más tarde por si era suyo o no el gol de Bruno Fernandes ante Uruguay; luego por el debate de su titularidad trasladado a la opinión pública; hace una semana por el gesto a Fernando Santos al término de la derrota por 2-1 ante Corea del Sur que no le gustó «nada» al técnico; el pasado martes por su suplencia ante Suiza; el miércoles porque se entrenó en el gimnasio y el jueves por la citada noticia, negada por la Federación Portuguesa.

(EFE)