La reciente destitución del presidente Pedro Castillo por parte del Congreso peruano, lejos de ofrecer una salida a la crisis política que atraviesa el país desde hace al menos cinco años, ha servido para insuflar los ánimos de una ciudadanía harta de los abusos de poder y del permanente socavamiento de la democracia. 

El análisis es del filósofo venezolano Miguel Ángel Pérez Pirela en la reciente emisión de Desde Donde Sea, espacio en el que abordó los pormenores de la situación que atraviesa la nación suramericana. 

Acotó que en las últimas jornadas miles de ciudadanos se han volcado a las calles de las principales ciudades del país para exigir el cierre del Parlamento, la convocatoria inmediata a elecciones legislativas y la liberación de Castillo, quien se encuentra detenido desde el pasado 7 de diciembre por presuntos cargos de rebelión y conspiración. 

Entretanto, comentó Pérez Pirela, las autoridades han decretado estado de emergencia en todo el país y han reprimido con dureza las manifestaciones.

En su opinión, un Congreso que acumula más de 80 % de rechazo y una presidenta (Dina Boluarte) por la que nadie votó, en contubernio con un Poder Judicial corrompido, están rigiendo los destinos de Perú. 

“La única forma de resolver el nudo en el cual se encuentra desde hace varios años la política peruana es con una nueva Constitución, porque los desmanes que estamos viendo en Perú tienen que ver con una Constitución estructurada por el fujimorismo”, recalcó. 

Destacó que los medios peruanos no solo están ocultando los hechos –como lo hicieron en Venezuela durante el golpe de Estado contra Chávez en abril de 2002– sino que están desinformando, con el objetivo de legitimar las acciones de Boluarte, cuya administración depende del Congreso, tal y como sucedió con el gobierno de facto de Jeanine Áñez en Bolivia. 

(LaIguana.TV)