Tras varios meses de trabajo, los gobiernos de Venezuela y Colombia suscribieron este viernes un Tratado para la Promoción y Protección Recíproca de inversiones, que se inscribe entre la política de regularización de relaciones a partir de la creación de una institucionalidad que consolide la integración binacional.

Por Venezuela, la representación recayó en el presidente Nicolás Maduro y la vicepresidenta Delcy Rodríguez, al tiempo que el gobierno del presidente Gustavo Petro estuvo representado por el ministro de Industria, Comercio y Turismo, Germán Umaña.

Según se lee en el comunicado oficial, el objetivo de esta iniciativa de integración económica es «atraer inversiones para impulsar la industria complementaria de bienes y servicios, promoviendo el desarrollo sostenible, la diversificación productiva, la formación de cadenas de valor y la creación de empleos calificados, lo anterior, respetando siempre los estándares laborales y medioambientales».

Según expresara Umaña, se trata de una resolución «histórica» largamente anhelada que solo ahora pudo concretarse y que asegura la integración entre las dos naciones bolivarianas desde una perspectiva humana.

Maduro, por su parte, compartió el punto de vista del funcionario colombiano, al tiempo que aseguró que era el primer paso para el establecimiento de una Zona Económica Especial trasfronteriza.

«Es quizá ahora en el siglo XXI en donde se han creado de nuevo las condiciones para reencontrarnos, para pensar en grande, en la unión de toda América Latina y el Caribe. Uno de los pensamientos que quizá tendríamos que cultivar es la construcción de una gran Zona Económica Común de Desarrollo entre América Latina y el Caribe», manifestó.

A continuación, el texto íntegro de la declaración conjunta:

Acuerdo sobre la Promoción y Protección Recíproca de Inversiones

A dos semanas de haber concluido las negociaciones sobre el Tratado para la Promoción y Protección Recíproca de Inversiones, los gobiernos de Colombia y Venezuela suscribieron este viernes dicho acuerdo.

En representación de las partes, suscribieron el acuerdo el ciudadano Nicolás Maduro Moros, la vicepresidenta ejecutiva y ministra del poder popular para la Economía, Finanzas y Comercio Exterior de la República Bolivariana de Venezuela y el ministro de Industria, Comercio y Turismo de Colombia, Germán Umaña Mendoza.

Reconstruyendo la relación desde la institucionalidad y el acuerdo, es uno de los aspectos que cumple con ese objetivo. Con esto se busca establecer y mantener y, a la vez, establecer un marco jurídico que favorezca las inversiones directas transfronterizas.

Este Tratado pretende atraer inversiones para impulsar la industria complementaria de bienes y servicios, promoviendo el desarrollo sostenible, la diversificación productiva, la formación de cadenas de valor y la creación de empleos calificados, lo anterior, respetando siempre los estándares laborales y medioambientales.

El efecto es que las inversiones tienen reglas claras respecto a las nacionalizaciones, sujetándolas solo a razones de utilidad o interés público, necesidad o interés general, de acuerdo con las nomas de cada país y respetando el debido proceso.

Igualmente, establece un trato igual entre naciones, entre nacionales venezolanos y colombianos, bajo la protección del estándar nacional, lo cual guarda así los equilibrios entre los potenciales inversionistas extranjeros y nacionales.

Incluye un precedente importante y es la posibilidad de que los inversionistas de Venezuela y de Colombia puedan activar el mecanismo de solución de controversias por posibles disputas que surjan bajo este acuerdo.

Ambos países celebran la suscripción y esperan que sea un paso importante para fomentar más inversiones bilaterales.

(LaIguana.TV)