EEUU ha reanudado un programa de construcción de biolaboratorios en Ucrania y está ampliando el formato de formación de los biólogos ucranianos, declaró el jefe de Fuerzas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia, Ígor Kirílov.

«A pesar de una pausa forzada debido a la operación militar especial, ahora se han reanudado las actividades del programa. Las principales tareas en esta etapa son continuar la construcción de biolaboratorios en Ucrania y ampliar el formato de formación de los biólogos ucranianos», explicó Kirílov en una sesión informativa.

Llegó a esta conclusión basándose en el análisis de las actas de la reunión del 20 de octubre de 2022 de un grupo de trabajo de especialistas estadounidenses y ucranianos, encabezado por representantes de la Agencia de Reducción de Amenazas de Defensa de Estados Unidos (DITRA), sobre los planes de aplicación del «Programa de Reducción de Amenazas Biológicas en Ucrania».

De acuerdo con Kirílov, los hechos revelados por el Ministerio de Defensa de Rusia sobre las actividades militares—biológicas del Pentágono obligan a Washington a esforzarse por ocultar la verdadera naturaleza del trabajo. Subrayó que, para ello, EEUU cambió el nombre del programa «Investigación Biológica Conjunta», cuyo objetivo real es desarrollar componentes de armas biológicas. Ahora se llama «Investigaciones para el Monitoreo Biológico».

De acuerdo con sus palabras, el Pentágono financia proyectos de doble uso mediante un sistema de subvenciones, en el que participan el Centro de Ciencia y Tecnología de Ucrania y el Centro Internacional de Ciencia y Tecnología.

«El objetivo del programa de reducción de la amenaza biológica del Centro Internacional de Ciencia y Tecnología es proteger a EEUU, sus FFAA y sus aliados. Esto confirma una vez más que Washington considera el espacio postsoviético como un trampolín para el despliegue de unidades militares de la OTAN», declaró.

Sin embargo, muchos de los responsables de los programas biológico-militares han abandonado Ucrania, EEUU los busca urgentemente para evitar filtraciones.

Respuesta inarticulada

Kirílov puntualizó que el Pentágono seguirá sus trabajos en biolaboratorios ucranianos y en otros lugares debido a la inarticulada respuesta de la comunidad mundial y al miedo a desafiar a Washington.

Destacó que el Departamento de Estado de EEUU ha preparado una serie de publicaciones en las que intenta cuestionar los hechos documentados de su investigación biológica ilegal. El 14 de marzo, el Departamento de Estado publicó en su página web un boletín en el que acusaba una vez más a Rusia de desinformación.

Peligro biológico

Asimismo, el jefe de Fuerzas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia advirtió que el despliegue de laboratorios biológicos de EEUU en terceros países amenaza a regiones enteras.

«El traslado de las investigaciones más peligrosas fuera del territorio nacional es parte de la estrategia de EEUU en materia de seguridad biológica, mientras el despliegue de objetos biológicos en terceros países no tiene en cuenta los intereses de la población local y representa una grave amenaza para las regiones enteras», indicó.

Kirillov también alertó de los peligros de tales acciones estadounidenses. «Estados Unidos nunca ha aclarado su compromiso con la seguridad de la investigación en los biolaboratorios bajo su control. Su falta de transparencia crea un riesgo de propagación de patógenos peligrosos en las zonas donde se encuentran las instalaciones de armas biológicas», afirmó Kirílov.

Como ejemplo de tal amenaza, Kirílov citó el caso del contrabando de sustancias tóxicas a las bases militares estadounidenses en Corea del Sur. A este respecto, en agosto de 2021, una ONG surcoreana demandó al Laboratorio Biológico de Fort Detrick y al Ejército estadounidense en Corea por introducir de contrabando sustancias tóxicas en las bases militares estadounidenses, violando la legislación nacional.

Participantes de programas biológicos en Ucrania

El Ministerio de Defensa ruso anunció los nuevos nombres de participantes de programas biológicos militares de EEUU y Ucrania.

«Completamos la lista de personas involucradas en la investigación biológica del Pentágono. Entre ellos está Elliot Jacobs Perlman, jefe de la organización no gubernamental ‘Instituto Internacional para el VIH y la Tuberculosis’ en Kiev, participó directamente en la creación de un laboratorio base para implementar la investigación biológica militar en el territorio de Ucrania», informó Kirílov.

El teniente coronel también mencionó a Greg Glass, profesor del Instituto de Patógenos Emergentes de la Universidad Estatal de Florida que estudió la transmisión de la tularemia —una infección bacteriana en conejos y liebres silvestres— en Ucrania y participó en la implementación del proyecto Yu-Pi-8 sobre la propagación del virus de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo y los hantavirus en el territorio ucraniano.

Además, mencionó al profesor Andrew Stanley Pekosz, que fue uno de los principales consultores del proyecto U-P2 sobre el uso de sistemas de información geográfica, monitoreo remoto y diagnóstico de laboratorio para detectar tularemia y ántrax en humanos y animales en Ucrania.

«Entre los ejecutantes de proyectos biológicos militares estadounidenses se encuentran ciudadanos de Ucrania: Natalia Ródina, directora general adjunta del Centro de Laboratorio Regional de Kiev del Ministerio de Salud ucraniano y exempleada de la empresa estadounidense Black and Veatch. Desde 2020, ha sido asesora del comandante de las fuerzas médicas del Ejército de Ucrania para cuestiones de diagnóstico de laboratorio», explicó Kirílov.

Asimismo, dio el nombre de Elena Nésterova, directora del Instituto Ucraniano de Investigación en Salud Pública, que participó en los proyectos y coordinó las actividades de la empresa Labyrinth Global Health, encargada de llevar a cabo la interacción entre los organismos estatales de Ucrania y la empresa estadounidense Metabiota.

Vacunas peligrosas

El Ministerio de Defensa de Rusia continúa analizando las actividades biológicas militares de EEUU y sus aliados en Ucrania y otras regiones del mundo. Kirílov agregó que el Ministerio de Defensa ruso también publicó los nombres de los estadounidenses asociados con el desarrollo y la producción de vacunas peligrosas.

«El Ministerio de Defensa de Rusia informó previamente sobre los estudios de ‘evolución dirigida’ de las compañías farmacéuticas estadounidenses, las llamadas Big Pharma, así como sobre la corrupción y colusión con las agencias gubernamentales de EEUU relacionadas con el desarrollo y la producción de vacunas», detalló.

Según el teniente coronel, «la conspiración entre los funcionarios y los fabricantes de la vacuna anti-COVID de Pfizer permitió el lanzamiento de medicamentos con efectos secundarios graves».

Implicación del Ministerio de Energía estadounidense

Kirílov afirmó también que el Ministerio de Energía de EEUU, junto con el Pentágono, es el principal organizador y participante directo en las actividades biológicas militares estadounidenses.

Recordó la declaración del Ministerio de Energía de EEUU de que la pandemia del coronavirus pudo haber ocurrido a raíz de un accidente que filtró el virus de un laboratorio en Wuhan.

«Surge una pregunta legítima: ¿qué tiene que ver el Ministerio de Energía de EEUU con la lucha contra las amenazas biológicas y la implementación de proyectos que tienen signos de doble uso?», resumió.

Rusia acusa que Estados Unidos, bajo el pretexto de desarrollar los sistemas de seguridad en laboratorios, ha estado desarrollando armas biológicas en territorio ucraniano, donde algunos de los rastros fueron parcialmente destruidos el día que se inició la operación militar especial rusa, es decir, el 24 de febrero de 2022.

(sputniknews)