Brasil y China hicieron un llamado a una reforma del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para permitir una mayor presencia y acción de países del Sur en desarrollo.  

«Las partes (…) reconocieron la necesidad de reformar la ONU y su Consejo de Seguridad para hacerlos más representativos y democráticos. Enfatizaron también el impulso de las reformas necesarias y adecuadas del Consejo de Seguridad para permitir un papel mayor para los países en desarrollo», señala la declaración conjunta. 

Asimismo, reiteraron su compromiso con la defensa del derecho internacional y con la promoción de las relaciones internacionales y el multilateralismo.  

Lula y Xi también ratificaron su «apoyo a la autoridad de la ONU y a su papel central en el mantenimiento de la paz y de la seguridad internacionales, así como en la promoción del desarrollo».  

La declaración subraya que Pekín «atribuye gran importancia a la influencia que Brasil ejerce en asuntos regionales e internacionales», y, por tanto, «comprende y apoya» la aspiración del gigante sudamericano a desempeñar «un papel todavía más prominente» en el foro mundial.  

El grupo BRICS 

Brasil y China también expresaron su coincidencia en la necesidad de apoyar los esfuerzos para expandir el grupo BRICS, que actualmente está también integrado por Rusia, India y Sudáfrica. 

«Las partes (…) apoyaron la promoción de las discusiones activas entre miembros del BRICS sobre el proceso de expansión del BRICS, y resaltaron la necesidad de aclarar los principios guía, las normas, criterios y procedimientos para este proceso de expansión con base en una amplia consulta y consenso», afirma la declaración. 

En el texto se subraya que «la parte china manifestó también el apoyo de Brasil en su ejercicio de la presidencia del BRICS en 2025». Asimismo, señala que «las dos partes se comprometieron a una continua profundización de la cooperación en todas las áreas en el ámbito del BRICS». 

El principio internacional de una sola China 

El presidente de Brasil reiteró el respaldo de su país al principio internacional de una sola China. 

«La parte brasileña reiteró que adhiere firmemente al principio de una sola China, y que el Gobierno de la República Popular de China [Pekín] es el único gobierno legal que representa a toda China, mientras que Taiwán es una parte inseparable del territorio chino», señala la declaración conjunta. 

Se conoce como una sola China a la posición política internacional, adoptada también por EEUU, que reconoce a la China continental, Hong Kong, Macao y Taiwán como parte de una única entidad nacional. 

La asunción de esa política implica no reconocer a Taiwán como estado soberano. 

La tensión entre China y Taiwán se agravó a partir de agosto pasado, tras la visita a la isla de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, efectuada pese a las protestas de Pekín, que vio en ese viaje el apoyo por Washington al separatismo taiwanés y organizó ejercicios militares de gran escala. 

La crisis se agravó en las últimas semanas con la visita, a su vez a EEUU, de la jefa de la administración de Taiwán, Tsai Ing-wen, quien se reunió con el presidente de la Cámara de Representantes estadounidense, Kevin McCarthy. 

Pekín señaló que el viaje de la lideresa taiwanesa contradecía el principio de una sola China. China envió naves militares para patrullar el Estrecho de Taiwán en una aparente respuesta a la reunión de Tsai en Los Ángeles. 

El conflicto en Ucrania 

Asimismo, Lula subrayó el apoyo de su país a la iniciativa de China para encontrar una salida pacífica al conflicto en Ucrania

«Brasil recibió positivamente la propuesta china que ofrece reflexiones conducentes en busca de una salida pacífica para la crisis en Ucrania», indica la declaración. El texto añade que «las partes afirman que el diálogo y la negociación son la única salida viable para la crisis en Ucrania, y que todos los esfuerzos conducentes a una solución pacífica de la crisis deben ser estimulados y apoyados». 

En febrero, China formuló 12 planteamientos clave para la solución política de la crisis de Ucrania. El plan propone respetar la soberanía de todos los países, abandonar la mentalidad de la Guerra Fría, cesar las hostilidades, reanudar las conversaciones de paz, resolver la crisis humanitaria, proteger a los civiles y prisioneros de guerra, mantener la seguridad de las centrales nucleares y reducir los riesgos estratégicos. 

Asimismo, sugiere facilitar las exportaciones de cereales, poner fin a las sanciones unilaterales, mantener estables las cadenas industriales y de suministro, y promover la reconstrucción posconflicto. 

Rusia señaló que muchos puntos del plan podrían tomarse como base para un arreglo pacífico del conflicto cuando Occidente y Kiev estén dispuestos a ello, mientras que Ucrania calificó la propuesta de «muy general» y «contradictoria». 

El cambio climático 

Además, los mandatarios de Brasil y China llamaron a articular una respuesta urgente contra el cambio climático, que erradique también la pobreza y el hambre. 

«Brasil y China subrayan la necesidad de combinar una respuesta climática urgente con la conservación de la naturaleza para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluida la erradicación de la pobreza y el hambre, sin dejar a nadie atrás», afirma la declaración conjunta. 

(Sputnik)