El gobierno venezolano rechazó este lunes los señalamientos de Estados Unidos relativos a supuestas presiones judiciales ejercidas sobre líderes religiosos, vaciadas en un informe anual sobre libertad religiosa presentado este lunes por el secretario de Estado, Antony Blinken.

«Rechazamos el informe sobre libertad religiosa del gobierno de los Estados Unidos, que continúa tomándose atribuciones que no le han otorgado mecanismos multilaterales ni otros Estados soberanos», escribió en su cuenta de Twitter el canciller Yván Gil.

Gil aseguró que Venezuela «es un ejemplo de tolerancia y convivencia armoniosa entre culturas y religiones» y destacó los esfuerzos del Gobierno Bolivariano «en favor de las diversas expresiones religiosas, que conviven en paz dentro de nuestro territorio».

Según reseña EFE, «el informe, presentado este lunes, incluye a Venezuela y hace referencia a la Ley Contra el Odio, que castiga con penas hasta de 20 años de cárcel y amenaza con el cierre a medios y la ilegalización a partidos políticos que promuevan ‘el fascismo'».

Sobre esa base, en el texto presentado por Washington se asevera que «en ocasiones, el régimen –el gobierno de Venezuela– aplicó la Ley Antiodio que criminaliza las actividades de los partidos políticos que promueven el ‘fascismo, la intolerancia o el odio’ a los actores religiosos. En otros casos, atacó a los líderes religiosos con el Código Penal».

En particular se refiere que «según representantes de la comunidad judía, el régimen y sus simpatizantes, incluidos algunos medios de comunicación afiliados, aumentaron su retórica antisemita durante el año».

(LaIguana.TV)