El precio del diésel en EEUU se disparó el pasado jueves, 14 de septiembre, por encima de los 140 dólares, el nivel más alto jamás registrado para esta época del año, mientras que el costo de este hidrocarburo en Europa ha subido un 60% desde este verano, informa Bloomberg. La agencia indica que las refinerías de petróleo a nivel mundial se están mostrando impotentes para producir suficiente diésel, lo que priva a las economías de un combustible que impulsa tanto la industria como el transporte.

El medio señala que la situación en el sector podría empeorar, ya que este 5 de septiembre Arabia Saudita y Rusia, líderes de la alianza OPEP+, otra vez anunciaron que prolongarían las restricciones de producción y exportación del crudo más rico en diésel hasta el fin de año, que es la época en la que la demanda del combustible suele aumentar.

«Corremos el riesgo de que continúe la escasez en el mercado, especialmente de destilados, en los meses de invierno», cita la agencia al recoger las declaraciones del jefe de la división del mercado de petróleo de la Agencia Internacional de Energía (AIE), Toril Bosoni, quien se refirió a la categoría de combustible que incluye el diésel. «Las refinerías están luchando por mantenerse al día», añadió Bosoni.

Recortes, más recortes

En marzo, Rusia procedió a reducir la producción de crudo en 500.000 barriles diarios respecto de los índices promedios contabilizados en febrero en reacción al ‘tope al precio’ impuesto por Occidente. El recorte se ha prorrogado varias veces: primero hasta junio y luego hasta finales de 2023. Así, este 5 de septiembre, Rusia decidió extender el recorte de las exportaciones de crudo en 300.000 barriles diarios hasta final de año. De acuerdo con el viceprimer ministro ruso, Alexánder Nóvak, esta nueva decisión «tiene como objetivo fortalecer las medidas de precaución tomadas por los países de la OPEP+ para mantener la estabilidad y el equilibrio de los mercados petroleros».

Arabia Saudita, por su parte, anunció la reducción de su producción de petróleo por otros tres meses. Además, China emitió recientemente una nueva cuota de exportación de combustible, en un contexto en el que los envíos han estado estancados cerca de los mínimos estacionales de los últimos cinco años durante gran parte de 2023.

El declive de los suministros de combustible se refleja en centros de almacenamiento. Así, las reservas observables en EEUU y Singapur están actualmente por debajo de los niveles estacionalmente normales y los inventarios en los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) son más bajos que las de hace media década, concluye el medio.

(RT)