La milicia proiraní Kataib Hizbulá, que opera en Irak, amenazó con atacar «cualquier base» estadounidense en Oriente Medio, si Washington intenta una represalia para vengar la muerte de tres militares suyos en Jordania. Dos días antes había dicho que suspendía sus acciones militares contra Washington.

«Kataib Hizbulá confirma que está dispuesto a responder en cualquier momento y en cualquier lugar», dijo un portavoz del grupo al semanario Newsweek, añadiendo que esta milicia «tiene armas de largo alcance no declaradas y puede atacar cualquier base en Oriente Medio».

Según el portavoz, Kataib Hizbulá se está preparando para «una posible escalada por parte de Biden, pero la respuesta potencial aún no está definida con precisión», pues hay «varias opciones de respuesta».

La nueva postura del grupo contrasta con la que adoptó hace un par de días, cuando anunció «la suspensión de las operaciones militares y de seguridad contra las fuerzas [estadounidenses] de ocupación para evitar avergonzar al Gobierno de Irak».

El pasado 28 de enero, el Mando Central de Estados Unidos comunicó que tres de sus soldados murieron y otros 34 resultaron heridos en un ataque con drones contra una base militar estadounidense situada en el noreste de Jordania, cerca de la frontera con Siria.

A su vez, el portavoz del Gabinete jordano, Muhanad Mubaidin, insistió en que el objetivo del ataque era la base estadounidense de Al Tanf, en Siria, y no la base en el territorio de Jordania.

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, atribuyó el ataque a «las fuerzas respaldadas por Irán» y prometió que el Pentágono responderá en el momento y en el lugar que estime pertinentes.

Sin embargo, Teherán ha negado cualquier implicación en la agresión y advirtió que responderá ante cualquier amenaza hecha por Washington.

Según el canal de televisión Fox News, el ataque fue reivindicado por la Resistencia Islámica en Irak, una amplia coalición de grupos armados supuestamente apoyados por Irán.

El Ministerio de Exteriores iraní tachó de «provocativas» e «infundadas» las acusaciones contra Teherán. Su portavoz, Naser Kanani, subrayó hace días que «los grupos de resistencia en la región no reciben órdenes» y de Irán y que este, si bien desaprueba la evolución de conflictos en la región, «no interviene en las decisiones de los grupos de resistencia sobre cómo apoyar al pueblo palestino o defenderse a sí mismos y a su país contra cualquier forma de agresión y ocupación».

(Sputnik)


Más noticias y más análisis de LaIguana.TV en YouTubeWhatsAppXInstagramTikTokFacebookThreads y Telegram.

El portal de Venezuela.