A finales de enero sorprendieron las imágenes de equipos especiales israelíes disfrazados de civiles palestinos y armados entrando a un hospital de Cisjordania para asesinar a tres personas presuntamente ligadas a Hamás. Ahora, expertos de Naciones Unidas dicen que ese acto podría representar un ‘crimen de guerra’.
Expertos de la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas advirtieron el 9 de febrero que las aparentes ejecuciones extrajudiciales por parte de Israel de tres palestinos en el hospital Ibn Sina de la ciudad de Yenín, en Cisjordania ocupada, pueden constituir graves violaciones del derecho internacional de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario.
Según informes, citados por los expertos, el 29 de enero unos 10 miembros armados de la Agencia de Seguridad Israelí (Shin Bet) y de la Policía de Israel entraron en el hospital disfrazados de médicos, enfermeras y mujeres civiles. Fueron grabados por cámaras de seguridad mientras introducían en el hospital una silla de ruedas y una muñeca en un portabebés.
Tras entrar en una sala de rehabilitación, las fuerzas israelíes mataron a tiros a Basel Ayman Ghazawi, paciente que recibía tratamiento debido a las graves heridas causadas por un ataque aéreo israelí hace tres meses, a su hermano, Muhammad Ayman Al-Ghazawi, y a otro visitante, Muhammed Walid Jalamna.
Israel ha alegado que los tres jóvenes estaban implicados en actividades «terroristas» de grupos armados palestinos; sin embargo, los expertos de la ONU consideraron que las fuerzas israelíes están obligadas a respetar el derecho internacional en todo momento.
«En cualquier caso, Israel siempre está obligado a respetar el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario», afirmaron los expertos en un comunicado.
Los expertos insistieron en que no estuvo justificado el asesinato de los jovenes mientras uno de ellos se encontraba siendo atendido en el hospital y consideraron que pudieron haberlos detenido en vez de acabar con su vida.
«En territorio ocupado bajo control israelí, fuera de las hostilidades activas, como máximo las fuerzas israelíes podrían haber tenido derecho a arrestarlos o detenerlos. Solo podían usar la fuerza si era estrictamente necesario para impedir una amenaza inminente para la vida o lesiones graves. En lugar de ello, Israel optó por asesinarlos, en flagrante violación de su derecho a la vida», afirmaron.
Los expertos detallaron que las fuerzas israelíes cometieron al menos dos crímenes de guerra. El primero al ir disfrazados de civiles en una operación militar y el segundo al asesinar a un paciente indefenso y herido al interior de un hospital.
Según el derecho internacional humanitario, «matar a un paciente indefenso y herido que está siendo tratado en un hospital equivale a un crimen de guerra», dijeron los expertos al referirse a Basel Ayman Ghazawi.
«Al disfrazarse de personal médico y civiles aparentemente inofensivos y protegidos, las fuerzas israelíes también cometieron prima facie el crimen de guerra de perfidia, prohibido en toda circunstancia», agregaron los expertos.
Finalmente, el grupo de especialistas recuerda que los homicidios antes referidos se produjeron en medio de un alarmante aumento de palestinos muertos por las fuerzas israelíes en aparente violación de su derecho a la vida en Cisjordania desde el ataque del 7 de octubre de 2023 contra Israel perpetrado por grupos armados palestinos.
(Sputnik)
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