La República Bolivariana de Venezuela rechazó de manera categórica el robo perpetrado por Estados Unidos del avión de la Empresa de Transporte Aerocargo del Sur (Emtrasur), filial de Conviasa y propiedad de Venezuela, el cual estaba secuestrado en Argentina.

Mediante un comunicado, el canciller de la República, Yván Gil, aseguró que los gobiernos de EEUU y de Argentina “de manera artera han violado todas las normas que regulan la aeronáutica civil, así como los derechos comerciales, civiles y políticos que asisten a la referida empresa, colocando en riesgo la seguridad aeronáutica en la región”.

“Entre los ilícitos cometidos se ha observado el ocultamiento de información al momento de identificar el vuelo, apagado del transpondedor en varios trayectos de la ruta y otros que deben ser investigados de manera independiente”, refiere el texto.

Asimismo, calificó de “vergonzosa” esta “operación de rapacería”, que se inscribe en la lista de agresiones aplicadas por más de una década desde los Estados Unidos contra de Venezuela, la cual incluye el secuestro de activos, como la empresa Citgo, y la aplicación de más de 930 sanciones, “en complicidad con la extrema derecha opositora que actúa como agentes directos del imperio norteamericano”.

Al respecto, aseguró que la nación bolivariana es libre y soberana de dar “una respuesta contundente, directa y proporcionada ante este ataque, para lo cual usará todos los recursos disponibles en el marco de la Constitución nacional, la diplomacia y el Derecho Internacional”.

A continuación, el comunicado íntegro:

La República Bolivariana de Venezuela rechaza de manera categórica, el robo descarado de la aeronave Boeing 747-300, siglas YV 3531, perteneciente a la Empresa de Transporte Aerocargos del Sur (EMTRASUR S.A.), consumado el día de hoy luego de la confabulación entre los gobiernos de los Estados Unidos de Norteamérica y de la República de Argentina, quienes de manera artera han violado todas las normas que regulan la aeronáutica civil, así como los derechos comerciales, civiles y políticos que asisten a la referida empresa, colocando en riesgo la seguridad aeronáutica en la región.

La vergonzosa operación de rapacería se inscribe en la lista de agresiones delictivas en contra de la República Bolivariana de Venezuela, las cuales han sido aplicadas por más de una década desde los Estados Unidos e incluyen el secuestro de activos, como la empresa CITGO, y la aplicación de más de 930 sanciones ilegales, en complicidad con la extrema derecha opositora que actúa como agentes directos del imperio norteamericano contra Venezuela.

Venezuela libre y soberana dará una respuesta contundente, directa y proporcionada ante este ataque, para lo cual usará todos los recursos disponibles en el marco de la Constitución nacional, la diplomacia y el Derecho Internacional.

La República Bolivariana de Venezuela denuncia, ante la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI), la violación, por parte de ambos gobiernos antes mencionados, de las regulaciones internacionales a las cuales están obligadas los Estados en materia de navegación aérea, lo que genera una situación grave de inseguridad jurídica y operacional sin precedentes en nuestra región. Entre los ilícitos cometidos se ha observado el ocultamiento de información al momento de identificar el vuelo, apagado del transpondedor en varios trayectos de la ruta y otros que deben ser investigados de manera independiente. El Estado venezolano ejercerá todas las acciones que permitan restablecer la justicia y lograr la restitución de la aeronave a su legítimo propietario.

Ningún imperio, ni sus satélites lacayos, podrán doblegar la voluntad del pueblo venezolano, que ha decidido transitar la ruta de la verdadera independencia y construye su camino hacia la prosperidad política, económica y social, como ha sido demostrada al mundo en los últimos años.

Caracas, 12 de febrero de 2024.

(LaIguana.TV)


Más noticias y más análisis de LaIguana.TV en YouTubeWhatsAppXInstagramTikTokFacebookThreads y Telegram.

El portal de Venezuela.