Voceros del Gobierno de Estados Unidos, país campeón en violación de Derechos Humanos (DDHH) a lo largo y ancho del mundo, afirmaron estar “alarmados” por la situación en Venezuela. 

“Estamos alarmados por la decisión de represalia de Venezuela de suspender temporalmente la Oficina de Derechos Humanos de la ONU y expulsar a su personal después de que su informe expresara ‘profunda preocupación por la detención de la activista de derechos humanos’ Rocío San Miguel”, escribió en X la representación diplomática de EEUU en Colombia.   

Siguiendo con esta seguidilla, el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de EEUU, Brian Nichols, también empleó la red social X para mostrar su desacuerdo con la decisión soberana de Venezuela de no permitir que las instituciones internacionales que están en el país sirvan de “caja de resonancia de la extrema derecha venezolana”, tal y como lo afirmó el canciller venezolano, Yván Gil.

“La expulsión del personal de @UNHumanRights de Venezuela es alarmante. Escalada de intimidación a voces disidentes exacerba crisis humanitaria, política y económica de Venezuela”, escribió el alto funcionario gringo.

A esto se sumó la declaración de Michéle Taylor, representante permanente de Estados Unidos ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, quien afirmó lo siguiente en una publicación en la misma red social: “Estamos gravemente preocupados por los arrestos por motivos políticos, como el de Rocío San Miguel, y pedimos la liberación inmediata de todas las personas detenidas injustamente en Venezuela”.

Este jueves 15 de febrero, el gobierno del presidente Nicolás Maduro les dio plazo de 72 horas a los funcionarios de esta Oficina de la ONU para abandonar el país. «La vemos (a la oficina) muy activa cuestionando el accionar del Estado y esto en ningún Estado es tolerable», afirmó el canciller Gil al anunciar la decisión.

(LaIguana.TV)


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