La noche de este viernes 10 de agosto las autoridades de Argentina confiscaron el teléfono celular al expresidente Alberto Fernández a propósito de la investigación por violencia de género contra su expareja, la periodista Fabiola Yáñez.
Los fiscales de este proceso judicial, Ramiro González y Carlos Rívolo, solicitaron la medida, la cual fue realizada por la Policía Federal en el departamento de Puerto Madero, ubicación del domicilio del exmandatario.
De acuerdo con el medio Página 12, los oficiales además del teléfono móvil, también incautaron otros equipos electrónicos.
En días anteriores, la excompañera de Fernández optó por denunciar al exgobernante por presunta violencia machista, después de detectar en un teléfono de una secretaria del acusado las conversaciones y fotos que comprobarían los hechos.
El juez federal Julián Ercolini se encargó de inspeccionar el dispositivo, este funcionario lleva una causa contra el exdignatario por tráfico de influencias en la contratación de seguros para el Estado argentino.
Al presente, el caso lo caracterizaron por el delito de “lesiones leves en contexto de violencia de género”.
Ercolini prohibió a Fernández dejar el país y le ordenó no aproximarse, tampoco comunicarse por ningún medio, con Yáñez, quien habita en Madrid.
El pasado martes, Fernández en un comunicado publicado en X negó los cargos y expresó que mostrará evidencias de su falsedad en los organismos de justicia.
Conjuntamente, nombró a la abogada Silvina Carreira, una especialista en derecho de familia, como su representante legal.
(Laiguana.tv)
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