El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha comparecido este domingo para saludar a los simpatizantes congregados frente al Palacio de Carondelet en Quito para mostrarle su respaldo en medio de la incertidumbre política.
«Debemos estar vigilantes a todo lo que está pasando. Esta no es solo una elección. Es una lucha contra la desigualdad, contra el narcotráfico, la delincuencia. Es una lucha histórica. En cinco semanas venceremos», expresó Noboa.
El presidente también avisó que su Gobierno «no se rinde ante golpistas, ante la vieja política, que no sabe ya de qué manera afectar a este proyecto político, al cambio en el país».
Asimismo, Noboa instó a las fuerzas del orden a que estén «muy atentas de que el mal, la delincuencia, los grupos terroristas no se tomen sectores del país ni este Gobierno». «No lo permitiremos», resaltó.
El Palacio de Gobierno, situado en el centro histórico de la capital ecuatoriana, permanece cercado con vallas metálicas y protegido con presencia militar reforzada, luego de que Verónica Abad anunciara el sábado que asume esta jornada la Presidencia constitucional» del país, mientras Noboa «participa como candidato presidencial en la campaña electoral», viéndose obligado a pedir licencia y encargar la Presidencia durante el período de campaña a la actual vicepresidenta.
En respuesta a las declaraciones de Abad, las Fuerzas Armadas del país, así como la Policía aseguraron que acatarán «las disposiciones del presidente constitucional en funciones, Daniel Noboa».
Desde que inició la actual Administración en Ecuador, Noboa ha tratado de alejar a Abad. Además de enviarla a Israel y luego a Turquía, a lo que se unió el sumario abierto por el Ministerio de Trabajo que terminó en su suspensión por 150 días del cargo, la vicepresidenta fue multada por el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) con 20 salarios básicos unificados, es decir 8.500 dólares, al determinar que sí incurrió en campaña anticipada en las Elecciones Seccionales (locales y provinciales) de 2023. Sin embargo, la multa no supuso la destitución ni pérdida de los derechos políticos.
Los plazos de la suspensión de Abad se alinean con el comienzo y el cierre de la campaña electoral para las elecciones de febrero, en las que Noboa aspira a la reelección. La Constitución ecuatoriana le obliga a pedir licencia para hacer campaña, por lo que, de ley, le corresponde encargar la Presidencia del país durante ese período a la actual vicepresidenta.
El ministro de Gobierno, José de la Gasca, aseguró este jueves que «no es obligatorio que el presidente tome licencia», ya que «no existe una norma expresa» lo que establezca en estos casos. La Constitución obliga a pedir licencia solo en los casos de reelección, mientras que la actual candidatura de Noboa para las próximas elecciones «no es un caso de reelección», porque «así lo ha interpretado la Corte Constitucional» del país, argumentó.
(RT)
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