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El delantero venezolano Adalberto Peñaranda causó sensación en las redes sociales por convertirse en el goleador más joven en toda la historia del Granada CF en Primera División y por superar un récord logrado por Messi.

 

El Atacante Venezolano de 18 años Adalberto Peñaranda se convirtió en el jugador extranjero más joven en anotar dos tantos en un mismo partido en la Liga Española, dejando atrás a Messi. El criollo hizo el doblete con 18 años de edad y 195 días, mientras que Messi lo logró con 18 años y 219 días.

 

De igual forma este doblete sirvió para que su equipo ganara 1-2 un partido trascendental en el Estadio Ciudad de Valencia, además de esto hace un mes logró convertirse en el futbolista más joven en debutar en Primera División con el Granada.

 

Historia del jugador

El venezolano llegó a España el pasado verano como una más de esas muchas promesas que cada año fichan el binomio Udinese-Granada.

 

Lo hizo procedente del modesto Deportivo La Guaira venezolano y con un currículum en el que aparecían poco más de treinta partidos en la máxima división de su país y apariciones internacionales con la selección ‘Vinotinto’ sub-17 y sub-20.

 

Su destino en el Granada, con el que firmó por cinco años, estaba inicialmente en su equipo juvenil, pero con entrenamientos regulares y posibilidad de jugar en su filial de Segunda B.

 

Desde el primer momento convenció a José Miguel Campos, técnico del filial, a base de goles y destellos individuales, lo que llamó la atención del entrenador del primer equipo, José Ramón Sandoval.

 

El técnico madrileño, que estaba contra la espada y la pared por los malos resultados, apostó por el joven atacante venezolano en el pasado parón liguero, justo tras la derrota del Granada ante el Rayo Vallecano y antes del decisivo partido en casa frente al Athletic.

 

Solo unos entrenamientos bastaron a Sandoval para entender que Peñaranda era la solución futbolística a la que debía agarrarse. Fue titular ante el Athletic, quitándole el sitio a fichajes estrellas del verano y a vacas sagradas del vestuario como el congoleño Thievy Bifouma, el uruguayo Nico López, Francisco Medina ‘Piti’ o Rochina.

 

Como delantero o en banda, teniendo más o menos brillo y acierto, el venezolano ya no ha salido del once y ha sido titular en los cinco últimos partidos del Granada, cuatro de Liga y uno de Copa.

 

Fan de los brasileños Ronaldinho, en su infancia, y Neymar, en una adolescencia de la que disfruta a miles de kilómetros de su casa, Peñaranda es tímido, muy religioso y hogareño, agradeciendo siempre todo lo bueno que le pasa a Dios y a su familia.

 

El ‘chamo’, como se conoce a los jóvenes de su edad en una Venezuela que le guardó sitio el domingo en las portadas de casi todos sus periódicos nacionales, ha vivido en los últimos años dos episodios que pudieron cambiar su vida.

 

En febrero de 2013, cuando aún no había cumplido 16 años, estuvo varios días entrenándose con el Real Madrid al ser uno de los tres venezolanos elegidos en el denominado Campamento PAN, que permitía a jóvenes valores sudamericanos probar en la cantera blanca gracias a un acuerdo de colaboración entre Empresas Polar y el club merengue.

 

Ya entonces declaraba a los medios de su país que eso era lo que él quería y se marcaba como metas a medio plazo jugar en Europa y poder debutar con la selección absoluta de su país.

 

Los sueños que ahora empieza a cumplir estuvieron a punto de truncarse hace ocho meses, cuando en Caracas tanto él como su compañero de equipo Charlis Ortiz fueron tiroteados a la salida de un local de ocio, horas después de haber jugado con el Deportivo La Guaira un partido de Liga frente al Deportivo Táchira.

 

La fortuna quiso que el disparo que recibió Peñaranda en un muslo tuviera orificio de salida, por lo que resultó herido leve y pudo recuperarse en casa tras pasar solo unas horas en el hospital. Su compañero también salvó la vida, a pesar de que tuvo que ser operado tras ser alcanzado en el brazo y en el pecho por dos tiros.

 

Sandoval ha dicho de Peñaranda que ha derribado la puerta del primer equipo y que él solo se ha puesto en el once por su trabajo, entrega y aportación.

 

Es el ‘chamo’ Adalberto, el venezolano que bate marcas de precocidad en la exigente Liga española y una de las grandes esperanzas de futuro del fútbol ‘Vinotinto’.

 

Así reaccionaron sus fanáticos en la red social Twitter al enterarse del récord de Peñaranda:

 

(N24)