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El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, pidió respeto a la decisión del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de la Organización de Naciones Unidas (ONU), que este viernes hizo público el informe que pide la liberación del fundador de Wikileaks, Julian Assange, al considerar que su detención es arbitraria.

 

Los gobiernos de Reino Unido y Suecia han descalificado el informe y el ministro de exteriores de Gran Bretaña, Philip Hammond, lo tildó de «ridículo».

 

En entrevista con Telesur para tratar el caso del periodista australiano, asilado de la embajada ecuatoriana en Londres, desde 2012, Patiño cuestionó la posición de los países europeos y dijo que «esa es la situación del mundo. Lamentablemente hay países que recurren a los organismos internacionales cuando les interesa, obedecen y respetan a los organismos internacionales cuando les interesa, y cuando no les interesa simplemente los desprecian».

 

«Este es un caso concreto: la ONU dice esto, nosotros seguimos haciendo lo que nos da la gana (en referencia a Reino Unido y Suecia), esta es la realidad de la política internacional», rechazó.

 

«Ojalá algún día los pueblos se movilicen para cambiar esta realidad de la política internacional y para que hagamos que los derechos humanos, los instrumentos internacionales, sean respetados. Algún día el mundo cambiará, y esperamos sea muy pronto», aseveró Patiño.

 

Mediante un documento, el grupo de expertos de la ONU calificó de arbitraria la detención de más de cuatro años del periodista australiano y señalan que la justicia de Suecia y Reino Unido deben resarcir los daños causados a Assange.

 

«Tiene derecho a su libertad de movimiento y a una compensación», reza el documento, y consideran «que el señor Assange ha sido sometido a diferentes formas de privación de la libertad: detención inicial en la prisión de Wandsworth (en Londres) que fue seguida de arresto domiciliario y su confinamiento en la embajada ecuatoriana».

 

Al respecto, el gobierno británico respondió que el fundador de Wikileaks «nunca estuvo detenido arbitrariamente» en su territorio, por lo cual expresaron su «profunda frustración porque se permita que esta situación siga así».

 

Por su parte, Suecia manifestó su desacuerdo por el dictamen emanado por la ONU, y agregó: «No tiene derecho a interferir en un caso en curso».

 

«Esta declaración debe ser observada, debe ser tenida en cuenta por los ciudadanos británicos, suecos y del mundo. No podemos seguir aceptando políticas arbitrarias, es una evidente persecución política, ya es tiempo que ambos gobiernos dejen en libertad a Julian Assange, y no continúen con esta detención arbitraria», exigió Patiño.

 

En 2010, Assange liberó información diplomática que da cuenta de los crímenes de guerra cometidos por Estados Unidos, así como documentos secretos que dejaron al descubierto prácticas ilegales de espionaje y de injerencia de la nación norteamericana contra varios países.

 

Esto lo ha convertido en un perseguido por el Gobierno estadounidense y lo mantiene en condición de asilado en la sede diplomática de Ecuador en Londres desde el 19 de junio de 2012, por temor a ser extraditado a Suecia y, posteriormente, enviado a EEUU, donde sería enjuiciado por publicar en su página web miles de documentos vinculados con la política exterior y militar de Washington, lo cual le podría acarrear pena de muerte.

 

(AVN)