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Buscando evitar que inescrupulosos capten agua de manera ilegal e irregular en la cuenca alta del río Bogotá, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) anunció que fue militarizado un tramo del afluente. La medida se adopta ante un eventual apagón en el país advertido por el Gobierno Nacional.

 

Según argumentó el director de la entidad, Néstor Franco, el líquido es usado de manera ilegal en industrias y riegos de cultivos. Lo anterior, afecta el funcionamiento del embalse El Muña, que surte de agua y energía a la capital.

 

“Es la primera vez en la historia de la Corporación Autónoma que se toma una decisión militarizar el río Bogotá en la cuenca alta (…) quedó instalado el puesto de mando unificado con presencia del Ejército Nacional, la Policía, la Armada Nacional, la Defensa Civil y de la Corporación Autónoma”, manifestó el funcionario en diálogo con Noticias RCN.

 

De acuerdo con la CAR, la captación de agua que se presenta en diferentes tramos del afluente es empleada con fines industriales, agroindustriales y agropecuarios, lo que supone un riesgo mayor para la ciudad ante un eventual apagón.

 

“Si se encontrare, ya la orden del Gobierno es inmediatamente efectuar decomisos de motobomba o cualquier otro elemento”, agregó Franco.

 

Debido a la crisis energética que enfrenta el país, la CAR anunció también que a partir de este jueves y hasta el 30 de julio, liberará alrededor de 78 millones de metros cúbicos de agua, que aportarán a la represa de El Muña para la generación de energía.

 

“La medida responde al manejo responsable del recurso hídrico que ha realizado la CAR en los embalses agregados del norte, lo que permite contar con una importante reserva de agua, sin poner en riesgo el suministro de agua para consumo humano de los municipios de Gachancipá, Tocancipá, Sopó, Cajicá, Chía y Bogotá”, sostuvo la entidad.

 

(El Espectador)