Este lunes, tras la justa liberación del diplomático Hugo Carvajal, Estados Unidos sangra por la herida y arremete contra Venezuela y Holanda, señalando que el gobierno venezolano «amenazó a Aruba, Holanda y otros países» para lograr este cometido.

Sin dar ni siquiera la cara, una portavoz gringa que prefirió mantener su anonimato, expresó cínicamente que «esta no es la manera en que deben manejarse los asuntos relacionados al cumplimiento de las leyes», pero no dijo nada sobre la arbitraria y totalmente ilegal detención del diplomático por parte de Aruba, siguiendo mandatos yanquis.

En este sentido, la funcionaria agregó que su gobierno está «profundamente decepcionado» por la liberación de Carvajal, pues según ella, estuvo justificada por alegatos de inmunidad que «van más allá de las normas internacionales establecidas», lo que se escucha más como una excusa infundada que como un argumento creíble.

Igualmente, con el mismo caradurismo aseguró que «Washington solicitó la detención en cumplimiento pleno del tratado de extradiciones que suscribió con Holanda y Aruba», sin especificar siquiera a qué artículos se refería.

Debemos recordar que Holanda liberó a Carvajal al reconocer su inmunidad diplomática. Cuatro días atrás lo había arrestado y prácticamente secuestrado a solicitud del gobierno gringo.

(LaIguana.TV)