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Cuando algunas personas sufren graves problemas de salud, hasta el punto de llegar al borde de la muerte, llegan a comprender que la vida no son solo apariencias, incluso llegan a realizar grandes transformaciones en su personalidad.

 

Tal es el caso de la famosa modelo brasilera Andreaa Urach, finalista de Miss Bum Bum en la edición de 2012, quien sufrió una grave infección ocasionada por inyectarse hidrogel en las piernas que ahora la tiene en una silla de ruedas, manifestó sentir vergüenza por su “estúpida vanidad”.

 

Así lo expresó la joven de 27 años durante una entrevista que concedió a Mailonline y dijo que ella cree que es “un castigo de Dios” por su obsesión con su físico y su “estúpida vanidad”. Además, declaró que “nació de nuevo y que se encontró con su creador”.

 

“Nunca olvidaré mi encuentro cara a cara con la muerte. Supe que nada más importaba. Todo por lo que yo había luchado, mi belleza, mis bolsos, mi ropa, mi carro, dejé todo eso atrás, fue un momento en el que me di cuenta que yo no era nada, que nosotros estamos en este mundo solo para salvar nuestras almas”, sentenció Urach en la entrevista.

 

Por otra parte, indicó: “Estoy pagando por mi vanidad. Era extremadamente vanidosa, todo por buscar la perfección. En lugar de hacer mi cuerpo más bello, terminé dañándolo y haciéndolo feo. Daría todo por regresar en el tiempo y hacer las cosas de otra forma. Nadie sabe por lo que yo estoy pasando, estoy en agonía constante. Todavía estoy en medio de una horrible pesadilla”.

 

Asimismo la modelo agregó, “todo esto que estoy viviendo es castigo por mi estúpida vanidad. Siento vergüenza por los agujeros en mis piernas, las cicatrices que estarán allí por el resto de mi vida, pero solo son también un trofeo que he conseguido por seguir viva. Ahora gracias a Dios, puedo decir a otras mujeres que la vanidad no es todo. Si todo esto sirve de ejemplo para salvar a otras mujeres de muertes prematuras, ¡entonces ha valido la pena!”

 

Por su parte, Nigel Mercer, presidente de la asociación británica de cirugías plásticas, comentó, “los doctores le salvaron la vida, pero ahora ella está confinada a una silla de ruedas y a grandes hoyos en las piernas, de los que los médicos extrajeron los químicos nocivos”.

 

 

(LaIguana.TV) 

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