En medio de una ritual ceremonial realizado en el museo de Lítico en Tiahunaco a más 65 kilometros de la capital de Bolivia, el presidente Evo Morales, fue ungido en incienso y humo copal como parte de un rito indio de protección y proclamación como el nuevo mandatario nacional.
Este ritual ancestral siendo uno de los más antiguos, es tomado por la tradición Aymara, etnia a la que pertenece el gobernante boliviano, como una liturgia que limpia todas las malas energías, que producen desequilibrio en todas las dimensiones.
El presidente Evo Morales, quien asumirá un nuevo mandato presidencial 2015 -2019 en su nación, pronunció un discurso de hermandad y solidaridad con el planeta. En sus declaraciones manifiesta que hay que detener la destrucción de la naturaleza y acabar con el capitalismo. Además menciona que no existe un primer o tercer mundo, todos somos responsables de este mundo y debemos actuar en pro de ello.
“Somos miles de colores pero somos un solo planeta, que nuestra pachamama nos ilumine y nos guíe en este camino de acabar con el capitalismo“, expresó Morales.
El Mandatario boliviano desde sus inicios como gobernante ha colocado todo su empeño por reivindicar los derechos indígenas y recalcó que la ceremonia Aymara no solo lo inviste como guía político y espiritual, sino que reafirma su identidad como boliviano y demócrata.
“Una de las cosas que los bolivianos debemos hacer es consolidar la revolución educativa y cultural, de justicia, trabajo y pensamiento para que perdure”, agregó el primer gobernante boliviano.
Finalizó su discurso agradeciendo el ritual, el cual consideró sagrado y milenario.
(LaIguana.TV)
(Fotografías Prensa Miraflores)
