Tras muchas afirmaciones polémicas, el nuevo presidente brasileño, Jair Bolsonaro, pide ahora que se apruebe en Brasil una ley que prohíba juzgar a policías por actos realizados en servicio.

 

A través de un mensaje en la red social Twitter, Bolsonaro ha pedido este viernes a todos los poderes del gigante suramericano que aprueben con celeridad un proyecto de ley de “seguridad jurídica” para la Policía, en el que se contemple la imposibilidad de que sean procesados cuando están en servicio activo.

 

“Sin las garantías necesarias para que los agentes de seguridad pública actúen en beneficio de los ciudadanos de bien, la reducción de los delitos no ocurrirá a la velocidad que piden los brasileños”, ha tuiteado el mandatario.

 

En el mismo mensaje, el ultraderechista y capitán retirado del Ejército, que asumió funciones como presidente el 1 de enero, agrega que “los tres poderes, el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial, tienen que asumir este compromiso urgentemente”.

 

Durante su campaña electoral, el nuevo mandatario prometió adoptar el llamado “excluyente de ilicitud” para operaciones de seguridad pública en la lucha contra crimen: una excepción que permitiría a la Policía usar fuerza letal sin temor a las consecuencias legales.

 

Los detractores de la propuesta advierten de que la excepción daría permiso a la policía para actuar sin restricción alguna y temen que se amplíen las circunstancias en las que el Ejército puede intervenir en la seguridad local, lo que podría resultar en una militarización de la vida pública. 

 

Además, Bolsonaro ha dicho querer dar tranquilidad a policías y soldados para que puedan realizar operaciones a menudo violentas, además de haber abogado por facilitar el acceso a las armas de fuego para que la gente pueda defenderse.

 

Este tipo de medidas no hará más que aumentar la violencia en las calles y empeorar el registro de asesinatos de Brasil, que llegó a casi 64 000 personas en 2017.

 

(Hispantv)