Este miércoles, durante la III Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), ocurrió un fuerte cruce de palabras entre los presidentes Solís de Costa Rica y Daniel Ortega de Nicaragua, debido a que este último le cediera parte de su derecho de palabra al líder independentista puertorriqueño, Rubén Berríos, para que defendiera la independencia de su pueblo.
Todo comenzó porque Ortega concedió el micrófono a Berríos, quien dedicó palabras para reivindicar el movimiento en Puerto Rico que busca la separación completa de los Estados Unidos. Actualmente son un Estado Libre Asociado del país norteamericano.
El líder independentista planteó un plan para que la Asamblea General de la ONU y la Celac se pronuncien sobre el caso de la colonización de Puerto Rico y exijan a Estados Unidos la liberación de un preso político. De igual forma, pidió que el mundo repudie cualquier maniobra que pretenda implantar el imperio para perpetuar el colonialismo bajo un disfraz.
Ante el contundente discurso de Berríos, el presidente de Costa Rica, como conductor del foro, le recordó con desfachatez a la delegación nicaragüense y al personaje que ese tema «no estaba en agenda».
“La Celac tiene procedimientos para establecer sus resoluciones, que se construyen a partir de consensos que son permanentemente concertados por medio de los coordinadores nacionales y los cancilleres», añadió con descaro.
Pero el asunto no terminó allí, pues Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, respondió que consideró oportuno y necesario el mensaje de Berríos.
«Usted está hablando de procedimientos y usted ha aplicado una serie de procedimientos al inicio de esta asamblea donde decidió darle la palabra a la Organización de Estados Americanos (OEA), el instrumento de colonia de los yanquis y a la Unión Europea», reclamó Ortega a Solís.
«Aquí está hablando Nicaragua como Estado, como Nación y la voz de Puerto Rico es la voz de Nicaragua, así que le pido un poco de respeto», concluyó Ortega.
(LaIguana.TV)
