El jefe de operaciones navales de la Marina de Estados Unidos, el almirante John Richardson, sostiene que Washington necesita estar listo para lanzar primero una eventual ofensiva contra buques de Rusia y China, según lo declaró este viernes durante su intervención en una conferencia celebrada en el instituto de investigación Atlantic Council, ubicado en Washington (EEUU).

 

«EEUU tiene que pensar no solo en respuestas para hacerlos retroceder, sino en cómo actuar primero en un par de áreas», respondió Richardson cuando el exsecretario general adjunto de la OTAN, Alexánder Vershbow, le preguntó sobre qué podría hacer EEUU para hacer retroceder a Rusia cuando este país toma el control de vías fluviales clave.

 

Asimismo, aseveró que tanto Rusia como China han desafiado de manera directa a la Armada de EEUU llevando a cabo maniobras navales peligrosas y agresivas en alta mar. En este sentido, insta a Washington a tomar medidas más enérgicas a la hora de responder las supuestas amenazas por parte de ambas naciones.

 

Por otro lado, Richardson explicó que EEUU debe analizar las medidas que garanticen su presencia en el mar Negro ante Rusia con la finalidad de, posteriormente, poner sobre la mesa posibles maniobras para realizar en la zona junto con «los países aliados». En calidad de ejemplo mencionó la posibilidad de establecer una sede en un país aliado cercano a Rumanía.

 

¿Hacia una escalada de tensiones?

 

Finalmente, el jefe de operaciones navales de la Marina de EEUU dijo que ha solicitado una respuesta «con músculo» ante las acciones de China, pese a que en un reciente viaje al país asiático hizo un llamamiento a favor de la estabilidad. Asimismo, Richardson aseguró que están dispuestos a firmar un tratado sobre comportamiento marítimo, recalcando que harán cumplir con firmeza los puntos del mismo.

 

En opinión de Vladímir Vasiliev, director del Instituto de Estudios de EEUU y Canadá (RAN, por sus siglas en ruso), las palabras de Richardson demuestran que la Casa Blanca tiene la intención de «crear una situación de tensión militar», según lo declaró a RT.  Asimismo, el experto considera que esta declaración puede deberse a que la Marina estadounidense busca más financiación de cara a los presupuestos de 2020.

 

Por su parte, el senador ruso Oleg Morozov opina que los llamamientos del almirante estadounidense para llevar a cabo una ofensiva contra Rusia podrían desencadenar una guerra nuclear, según declaró a RIA Novosti. «Esperemos que estos llamamientos no sean escuchados por aquellos que tienen un botón de guerra real en sus manos en EEUU», aseveró Morozov.

 

Además, el senador ruso Konstantín Kosachov dijo que los altos cargos militares de EEUU, al dirigir las tropas de una potencia nuclear, están seguros de que tienen derecho a aplicar la fuerza si cuentan con este poderío. El legislador señaló que «la impunidad alienta a estos militares a hacer declaraciones agresivas», sin percatarse «de las consecuencias reales de sus palabras», que -advirtió- el día menos pensado «pueden convertirse en acciones».

 

(RT)