Este miércoles 20 de marzo la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, presentó un informe respecto al escenario venezolano en el que planteó llegar a una solución política.

 

A continuación algunas de las frases que se desprenden del informe preliminar:

 

-Estoy sumamente preocupada por la magnitud y la gravedad de la repercusión de la crisis sobre los derechos humanos.

 

-Es esencial que el equipo tenga acceso total e irrestricto, y que no se den represalias contra ninguna persona que se haya entrevistado o tratarse de entrevistarse con ellos.

 

-Desde junio de 2018 –Última vez que publicamos un informe sobre Venezuela- el ejercicio de los derechos sociales y económicos ha seguido deteriorándose continuamente.

 

-Las autoridades se han negado a reconocer las dimensiones y gravedad de la crisis.

 

-La reciente interrupción del abastecimiento de fluido eléctrico que afectó a todo el país ha agravado esta situación, al reducir aún más el acceso de la población de alimentos, el agua y los medicamentos, y también ha afectado gravemente los hospitales.

 

-El sistema de atención sanitaria sigue deteriorándose.

 

-Según encuesta reciente, más de un millón de niños han dejado de asistir a la escuela, la mayoría porque sus padres no pueden proporcionarles desayuno.

 

-Aunque esta devastadora crisis social y económica comenzó antes de la imposición de las primeras sanciones económicas en 2017, me preocupa que las recientes sanciones sobre las transferencias financieras derivadas de la venta de petróleo venezolano a EEUU puedan contribuir a agravar la situación económica.

 

-Me preocupa profundamente la reducción del espacio democrático, en particular la continua criminalización de la protesta y la disidencia pacíficas.

 

-Mi oficina documentó numerosas violaciones y abusos de derechos humanos  perpetrados por las fuerzas de seguridad y los colectivos armados.

 

(LaIguana.TV)