cuadro-fruttaaa.jpg

La zuliana Dirsia Lizcano, ama de casa, tiene que ingeniárselas en su cocina para preparar los alimentos. Los altos precios en el costo de verduras y frutas han hecho que la población disminuya el consumo de los mismos.

 

“Solo le echo una papita al pollo, cuando antes le echaba tres y rendía más, ahora hay que rendirlo con agua. Estoy comprando cebollín que es más barato que la cebolla que está en 3.000 bolívares”, contó Lizcano.

 

Incrementos de hasta un 600% han sufrido las frutas y verduras en tan solo un año, la inflación sigue haciendo mella en estos alimentos esenciales en la nutrición de los venezolanos.

 

Un kilo de papa que el año pasado se conseguía en 300 bolívares, pero  ésta semana está en 1.500, un incremento de 400%, sin embargo, hay semanas en los que ha estado más costosa. La zanahoria está en Bs. 1.000, pero en 2016 estuvo en 300, aumentó 233%, tubérculos como la remolacha en 1.000 y la auyama entre 500 y 800 bolívares.

 

Cuando se pregunta en el comercio por verduras en rama como cilantro, cebollín, acelga, espinaca, ajoporro, célery, se consigue que todas las venden a un mismo precio, en Bs. 2.000 y hasta más.

 

Aiskel Chirinos, ama de casa, manifestó que los costos son “excesivos”, “un solo tomate o una papa te pueden costar 800 bolívares cada uno, y ayer compré en una bodega un pedacito de auyama, dos papas, un calabacín, un tomate y cuatro tomates de árbol, la cuenta me hizo 5.800 bolívares. Un plátano te cuesta 350 o más, mientras que un topocho 100”.

 

Por su parte, la orientadora Carmen González contó que el sábado pasado compró cinco ajíes, un pimentón y una cebolla por Bs. 900. “Estoy comprando lo que necesite para cocinar en el momento”.

 

El precio de la yuca también se disparó debido a la alta demanda, a falta de harina y arroz los ciudadanos optan por comprarla y los precios oscilan entre 500 y 700 el kilo. Un plátano está entre 250 y 350. Los comerciantes informales ofrecen 6 plátanos pequeños por Bs. 1.000 o 10 por 1.600.

 

Manuel Manjarrés, vendedor de la avenida Libertador, dijo que las ventas han estado “pésimas”, “antes vendía hasta 100 mil bolívares diarios, ahora solo la mitad”.

 

Una estrategia que usan los vendedores es armar combos de cuatro tomates pequeños, cuatro papas pequeñas o un puñado de ají dulce a Bs. 400 cada uno.

 

La cebolla, que en enero del año pasado estaba en 1.200 se consigue en 3.000, un incremento de 150%, el pepino a 1.300 el kilo, el calabacín a 1.000, el repollo a 1.000, la chayota a 500, apio a 1.500, al igual que el ocumo, ocumito, ñame y batata. 

 

Ni qué decir de las frutas, cuyo consumo también ha mermado. Una sola manzana o pera cuesta Bs. 1.800. La patilla está a 700 bolívares el kilo, la naranja a 300, mandarina a 1.000, parchita a 1.300, níspero a 1.000, mango a 800, la guayaba oscila entre 600 y 1.000, dependiendo el tamaño; un kilo de limones cuesta 1.000 y zapote a 800.

 

“Ya las frutas ni las como y las verduras un poquito, compro lo que vaya a usar en el día, porque ya no se puede comprar como antes. Estoy viendo qué puedo comprar porque ya el dinero no alcanza, me asombra ver un plátano en 300 bolívares”, señaló Elsy de Negrón, pensionada.

 

Ronald Oviedo, vendedor de frutas, culpa a los mayoristas de los altos costos. “La cesta de cambur está en 25 mil y trae 20 kilos, el saco de yuca trae 60 kilos pero al limpiarla te quedan 50 kilos y tiene un costo de 35 mil bolívares, entonces hay que venderlo a 700 o 800. La cesta de mandarina cuesta 20 mil y trae 30 kilos hay que venderla a 1.000. Para nosotros los minoristas  es  costoso”.

 

Agregó que un topocho puede costar 100 bolívares porque el racimo lo compran en 4 mil y 5 mil bolívares y “lo que trae son cinco ‘manos”.

 

(Panorama)