La defensora de los derechos humanos Paula Andrea Rosero Ordóñez fue asesinada la noche del lunes por un grupo de desconocidos en el departamento de Nariño, en el suroeste de Colombia, informaron fuentes oficiales.

 

Rosero Ordóñez, de 47 años de edad, era la representante del Ministerio Público de la población de Samaniego, en Nariño, y ya antes había denunciado amenazas en contra de su vida.

 

De acuerdo con un reporte policial, la abogada fue abordada por dos sicarios, quienes le dispararon a quemarropa.

 

Pese a que se le prestaron casi de inmediato los primeros auxilios, fue imposible salvarle la vida, indicaron los reportes.

 

 

La Procuraduría General de la Nación y la Defensoría del Pueblo de Colombia, en un comunicado conjunto, lamentaron el crimen.

 

Ambas instituciones exigieron al gobierno del presidente colombiano Iván Duque “tomar medidas de carácter urgente” para garantizar la vida de los defensores de los derechos humanos, así como de todos los líderes sociales.

 

En un recuento hecho la semana pasada, se estableció que tras la firma de los acuerdos de paz de Colombia, en noviembre de 2016, hay un saldo de 139 exrebeldes, 31 familiares, 596 líderes y 119 indígenas asesinados.

 

De acuerdo con la organización no gubernamental Programa Somos Defensores, de enero a marzo pasados fueron ultimados 25 defensores de derechos humano en Colombia.

 

(teleSUR)