Este 10 de julio, el cuerpo del capitán de corbeta de la Armada, Rafael Acosta Arévalo, fue enterrado en la parcela número 12 del cementerio del Este, ubicado en la Gran Caracas.

 

Al mediodía de este miércoles, se realizó la inhumación del cadáver de Arévalo, de acuerdo a la autorización del Tribunal 36º de Control del Área Metropolitana de Caracas.

 

Desde el pasado 21 de junio, Acosta Arévalo se encontraba detenido en la Dirección General de Contrainteligencia militar (Dgcim), por estar implicado en la más reciente operación golpista, que pretendía asesinar al presidente Nicolás Maduro, altos cargos del Gobierno Nacional, así como líderes de movimientos populares.

 

Ocho días después de su detención se supo de su deceso. El Gobierno Nacional confirmó su fallecimiento y se ordenó al Fiscal General de la República, Tarek William Saab, emprender una “investigación objetiva, independiente e imparcial en pleno respeto al Estado de Derecho vigente en Venezuela”.

 

La misión del militar retirado era tomar el Banco Central de Venezuela, robar vehículos blindados y fusiles. Además, Acosta Arévalo pretendía tumbar una antena de comunicaciones en Fuerte Tiuna.

 

El pasado 1 de julio el Ministerio Público solicitó la detención preventiva del teniente Ascanio Antonio Tarascio (23 años) y el sargento segundo Estiben José Zárate (22 años), ambos de la Guardia Nacional Bolivariana, por su presunta vinculación en la muerte de Acosta Arévalo. Ambos fueron imputados por “homicidio preterintencional concausal”.

 

(LaIguana.TV)