Han transcurrido diez años de la muerte de Michael Jackson y todavía despierta interés los secretos de su vida y fallecimiento. Una de las últimas revelaciones las realizó el documental Killing Michael Jackson, donde se señalan detalles desconocidos sobre la autopsia al cadáver del cantante, tales como que el artista estaba calvo y con cicatrices en todo su cuerpo cuando murió.

 

El audiovisual Killing Michael Jackson, dirigido y producido por ZigZag, gira en torno a la muerte del cantante y presenta los testimonios de los detectives que participaron en la investigación inicial de la muerte del músico: Orlando Martínez, Dan Myers y Scott Smith.

 

El detective Smith, de la policía de Los Ángeles, afirmó que el cantante solía llevar peluca. De acuerdo al documental, el artista se había hecho un tatuaje en la parte superior de la cabeza para disimular la ausencia de cabello.

 

“Cuando vi su cuero cabelludo observé cómo la parte superior de su cabeza estaba calva. Además, tampoco tenía casi ningún pelo en los costados”, dijo Smith ante las cámaras de Killing Michael Jackson.

 

El documental explica que la falta de cabello de Jackson se había producido a raíz de unas quemaduras que el artista sufrió durante un incidente que sufrió mientras filmaba un anuncio de Pepsi.

 

Por otro lado, el audiovisual también revela que el artista tenía el cuerpo lleno de cicatrices y marcas a causa de las diferentes cirugías a las que se sometió: detrás de las orejas, en la nariz, en la base del cuello, en las muñecas y los brazos, así como en otras zonas.

 

Michael Jackson, inmortalizado por éxitos como Thriller, murió a los 50 años el 25 de junio de 2009, producto de un paro cardíaco provocado por una sobredosis de un poderoso calmante llamado Propofol.

 

(LaIguana.TV)