El presidente brasileño Jair Bolsonaro quedó en falso luego de asegurar que tres empresas internacionales habían decidido cerrar sus plantas en Argentina para instalarse en Brasil. Luego de que las tres compañías negaran la versión, el mandatario tuvo que borrar la publicación.

 

La publicación de Bolsonaro sorprendió a propios y extraños en la mañana del miércoles 6. Fiel a su estilo, el presidente brasileño utilizó su cuenta de Twitter para resaltar lo que parecía una buena noticia ppara la economía brasileña y que, de paso, dejaba mal parado al presidente electo argentino Alberto Fernández.

 

«MWM, fábrica de motores americanos; la Honda, gigante de automóviles y L’Oreal, anunciaron el cierre de sus fábricas en Argentina y la instalación en Brasil. La nueva confianza de los inversores viene para generar más empleos y mayor crecimiento económico en nuestro país», escribió.

 

Lo que parecía una gran noticia para Bolsonaro y su Gobierno, pronto se le volvió en contra. Rápidamente, los medios argentinos se hicieron eco de la información e intentaron corroborar la afirmación del presidente brasileño con las representaciones de las empresas mencionadas en Argentina.

 

Desde Honda, por ejemplo, aseguraron a Infobae que la empresa «no cierra su planta en Argentina sino que mantendrá sus operaciones tal como estaba previsto, a partir de 2020 concentrando su producción en la línea de motocicletas».

 

El mismo medio recoge un comunicado de L’Oréal en el que, si bien no alude directamente al mensaje de Bolsonaro, asegura que la empresa «produce en Argentina cerca de 40 millones de unidades por año en sociedad con un productor local» y remarca que «no existe ningún plan para cambiar esto, de hecho nuestra ambición es continuar incrementando la producción local».

 

«Argentina es un mercado estratégico para L’Oréal y la compañía está comprometida en acompañar el crecimiento económico del país», añadió la empresa.

 

El caso de MWM es diferente. La empresa de motores efectivamente no producirá más en Argentina, aunque en realidad ya había anunciado el cierre de su planta en septiembre de este año. La empresa es de origen brasileño y cuando confirmó su retiro de Argentina comunicó que seguiría proveyendo al mercado argentino desde su sede central en Brasil.

 

Ante el rápido desmentido de las empresas involucradas, Bolsonaro no ofreció disculpas pero sí eliminó la publicación.

 

(Sputnik)