El fiscal estadounidense Jason Richman aseguró este miércoles que el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, recibió millones de dólares en sobornos por parte de narcotraficantes a cambio de protección, entre ellos, figura el capo mexicano Joaquín “Chapo” Guzmán.  

 

“Lo más importante, el acusado era protegido por el actual presidente [de Honduras] que ha recibido millones de dólares en coimas de narcotraficantes como el Chapo Guzmán, que personalmente entregó un millón de dólares al acusado para su hermano”, precisó el fiscal estadounidense, al inicio del juicio por narcotráfico contra el hermano del mandatario de Honduras en una corte de Nueva York.

 

La fiscalía del distrito sur de Nueva York lleva un proceso judicial contra el exdiputado hondureño Juan Antonio “Tony” Hernández Alvarado, a quien se le acusa de cuatro delitos: narcotráficos, posesión de armas de fuego y mentir a las autoridades. Desde hace casi un año está preso en Estados Unidos.

 

Richman afirmó que Tony Hernández era miembro de “una organización auspiciada por el Estado que distribuyó cocaína durante años” en Estados Unidos, con el propósito de obtener millones de dólares. Además, esta organización era protegida por una red de funcionarios hondureños corruptos: “alcaldes, legisladores, generales de las fuerzas armadas, jefes de la policía”.

 

El fiscal de Nueva York también acusó al exdiputado de ordenar al menos dos asesinatos de narcos entre 2011 y 2013.

 

Dinero de la droga para campañas electorales

 

En esta sucesión de acciones ilícitas y delictivas, la justicia estadounidense indica que el dinero de la droga hizo posible el enriquecimiento del acusado y el financiamiento de campañas de candidatos de su Partido Nacional, como las del expresidente Porfirio Lobo (2010-2014) y las de Juan Orlando Hernández, quien fue electo en el año 2013 y reelecto en unos comicios irregulares en el año 2017.   

 

En este sentido, una moción que presentó la fiscalía de Manhattan para el proceso señala que el presidente Hernández recibió de un narcotraficante —que ahora presta colaboración con la fiscalía— unos 1,5 millones de dólares de dinero para su primera campaña  y un millón de lempiras (como 40 mil dólares) para la segunda.

 

Asimismo, el  mismo testigo afirma que Lobo recibió 2 millones de dólares para su campaña.

 

Por su parte, Lobo y Juan Orlando Hernández rechazan las acusaciones y hasta el  momento, no han sido inculpados formalmente por la justicia de Estados Unidos.

 

(LaIguana.TV)