El exrepresentante del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos en Bolivia, Denis Racicot, advirtió que en el país se gesta una “ruptura profunda” del orden constitucional y “fractura social” por los actos de violencia ocurridos en el país antes y después de la salida de Evo Morales del territorio nacional, en el marco de las elecciones generales con acusaciones de fraude.
Para Racicot, las nuevas autoridades de Bolivia tras la salida de Morales son “autoproclamadas” y pretenden salir de la crisis actual sobre la base de una “violencia golpista sin límites”, comparado solo con el periodo de los regímenes militares y de facto.
“No cabe duda que se está desarrollando en el país una ruptura profunda del orden constitucional y probablemente una fractura social que difícilmente se podrá reparar”, se lee en la carta enviada por Racicot a Michelle Bachelet, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Ginebra, Suiza.
(ANF)








