La Junta Electoral Central (JEC) de España acordó la destitución del presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, tras ser condenado a un año y medio de inhabilitación por un delito de desobediencia.

 

En concreto, el acuerdo adoptado por la JEC decide «dejar sin efecto la credencial de diputado electo al Parlamento de Cataluña (…) de Joaquim Torra», lo que implica su cese como presidente catalán.

 

De acuerdo con el Estatuto de Autonomía Cataluña no puede ser presidente de la Generalitat una persona que no ocupe un escaño en el Parlamento regional.

 

El pasado 19 de diciembre el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) encontró a Quim Torra culpable de un delito de desobediencia por negarse a retirar insignias independentistas colocadas en edificios públicos en periodo preelectoral.

 

En su veredicto el tribunal consideró probado que Torra desobedeció a la JEC al no retirar unos lazos amarillos y pancartas en recuerdo de los «presos políticos» catalanes que se mostraron en la fachada de varios edificios públicos —entre ellos la propia sede del Gobierno catalán— durante la campaña electoral previa a las elecciones españolas del 28 de abril.

 

El fallo señala que Torra no cumplió las órdenes de la Junta Electoral pese a ser «conocedor y plenamente consciente del carácter imperativo» de estas, algo que el propio presidente admitió durante el juicio.

 

El dirigente alegó ante el juez que desobedeció las órdenes de la Junta Electoral porque estas eran «ilegales», al tratarse de un órgano inferior en la jerarquía al presidente, y porque debía «preservar los derechos» de los ciudadanos de Cataluña, unos argumentos que la sentencia desestima.

 

Tras conocerse la sentencia, este 3 de enero la JEC decidió retirar el acta de diputado del presidente catalán en cumplimiento de la condena de inhabilitación que le fue impuesta.

 

La resolución, acordada tras la presentación de un recurso por parte de partidos de la derecha española, declara que concurre una causa de «inelegebilidad sobrevenida» tras la sentencia del TSJC.

 

Por el momento la JEC comunicó su decisión, pero no hizo público el contenido íntegro de la resolución.

 

Según informa el diario El País, la resolución causó una gran división en el seno de la JEC, formada por ocho magistrados del Tribunal Supremo y cinco catedráticos nombrado por los partidos representados en el Congreso.

 

La Junta se dividió en siete votos favorables al cese y seis contrarios, que emitirán un voto particular al considerar que la administración electoral no es competente para adoptar la decisión.

 

El acuerdo de la JEC es recurrible y su aplicación está ahora en manos del Parlamento de Cataluña, donde hay una mayoría de formaciones independentistas.

 

Torra convocó una reunión extraordinaria de su gabinete.

 

«Quim Torra ha convocado para esta tarde un Consejo Ejecutivo extraordinario después de que la Junta Electoral haya acordado su inhabilitación», señala el Gobierno catalán un comunicado.

 

La reunión se celebrará a puerta cerrada a las 20.00 hora local.

 

(Sputnik)