El caso de la captura en Maracaibo de Aída Merlano, exsenadora prófuga de la justicia colombiana, ha dejado al desnudo la ficción de que Juan Guaidó es presidente encargado del país, pues se puso en evidencia que carece por completo de poder. Tal es la conclusión expuesta por el filósofo y comunicador Miguel Ángel Pérez Pirela en su programa Desde donde sea.

 

“Muchos esperábamos un evento como este, que ha revelado la verdad acerca de Guaidó, quien no controla territorio ni puede recurrir al Poder Judicial o al Ministerio Públuco ni ejerce mando sobre la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y por ello no puede responder a la solicitud de Iván Duque de que ordene la extradición de Merlano”, dijo el analista.

 

«Muchos venezolanos y no venezolanos esperábamos un hito histórico como este, porque yo puedo decir misa, yo puedo establecer criterios ficticios en los cuales soy presidente y hago giras internacionales, y doy discurso en Davos, pero en lo ejecutivo, en el día a día y en la cotidianidad sucede que un evento como este deja desnudo al rey, o al que se llama rey. Porque Estados Unidos podrán tranquilamente decir: ‘Guaidó te reconocemos presidente’. E incluso Duque decir: ‘Te reconocemos como presidente’. Y darle una patada al embajador de Nicolás Maduro en Colombia y colocar a Calderón Berti (que le renunció a Guaidó, por cierto, o lo botaron, y que ahora es Guanipa, creo…) Pero compadre, comadre, a la hora de la chiquita, cuando le capturan a la excongresista Aída Merlano, ¿cómo Guaidó va a extraditar a alguien, si ni siquiera tiene el poder de capturar a quien quiere extraditar?».

 

Recordó algunos pormenores del caso, como lo rocambolesca y hollywoodense que fue la fuga de Merlano, utilizando una cuerda (al estilo Mac Gyver) para bajar desde el consultorio de un dentista y ser llevada por un motorizado. También hizo hincapié en que los cuerpos de seguridad de Colombia fueron burlados por su escape y resultaron completamente ineptos para recapturarla, lo que sí hizo la policía venezolana, en una urbanización de clase media alta de Maracaibo.

 

Explicó que para aproximarse al tema se abstuvo de revisar los medios de comunicación venezolanos y le dio preferencia a los de Colombia. De manera sorprendente pudo comprobar que hasta los más furibundos enemigos de Venezuela y del presidente Nicolás Maduro coincidieron en admitir que es un absurdo y una gran irresponsabilidad el empeño de Duque de solicitar a Guaidó que extradite a la exsenadora.

 

«Para preparar este programa yo prácticamente hice caso omiso a lo que dijeron los medios de comunicación venezolanos, adrede, a propósito, y ya ustedes van a saber por qué. Para preparar este programa yo me fui a ver lo que decían los medios de comunicación colombianos, sobre todo y más que todo nos quisimos centrar en algunos de los análisis que hizo la revista Semana a través de diferentes programas de su plataforma Youtube. Y se los confieso, quedé anonadado. ¿Por qué anonadado? Porque prácticamente se trata de una burla colectiva por parte de políticos, periodistas y analistas colombianos sobre este gesto de Duque al pedir a Guaidó que extradite a la exsenadora. Miren, le han dicho de todo a Duque».

 

Ese cuestionamiento generalizado se debe, en su opinión, a que no existe un criterio racional o incluso razonable para pensar que  Guaidó puede extraditar a esta congresista Merlano. «¿Fueron las fuerzas de Guaidó, las fuerzas públicas de Guaidó las que capturaron a Aída Merlano? No. ¿Guaidó o el gobierno ficticio de Guaidó  han firmado algún acuerdo con Interpol para poder concretar esta extradición? No. ¿Está en manos de Guaidó avanzar acciones ante el Ministerio Público, encabezado por Tarek William Saab? No. Guaidó no tiene el poder de ejecutar una extradición de alguien que ni siquiera está en sus manos, porque no la ha capturado. Y utilizo bien la palabra ‘ejecutar’, porque es propio del Poder Ejecutivo: ejecutar. Y Guaidó no tiene competencias, habilidades, pero sobre todo no tiene el poder de ejecutar una extradición de alguien que él no ha capturado». 

 

El moderador hizo sátira al preguntarse si es que acaso Guaidó, concentrándose mucho; mucho, mucho, y haciendo una especie de yoga va a lograr que la señora Aída Merlano se transporte a Colombia. «Insisto: muchos estábamos esperando que sucediera algo de fuerza mayor, como la captura de una excongresista en este caso, para que el rey, o el que se hacía rey, se demostrara simplemente que estaba desnudo».

 

Recalcó una característica especial de este caso, y es que algunos de los colombianos más furibundos enemigos de Maduro dijeron: lo sentimos mucho, pero en esta ocasión tenemos que decir que quien está planteando las cosas de forma razonable y racional es Maduro y no Duque. 

 

Esas personas han reconocido que Maduro está en lo cierto cuando dice que incluso durante el gobierno de Alvaro Uribe Velez se rompieron récords de entregas de narcos.

 

«Yo no creo que haya un personaje más antitético al chavismo que Alvaro Uribe, no creo, de verdad no lo creo, pero durante su gobierno no se llegó a estos extremos. Y resulta que el gobierno de Duque, por esa ficción de que quiere reconocer a Guaidó como presidente, se rompieron relaciones incluso hasta consulares», comentó.

 

Pérez Pirela señaló que esa ruptura se relaciones consulares es una enorme irresponsabilidad, pues bien se sabe que en Venezuela habitan seis millones de colombianos, que han quedado así desamparados a la hora de necesitar diversos trámites. «Es una irresponsabilidad sin precedentes, porque una cosa son las diferentes ideologías políticas que puedan tener los gobiernos y otra cosa son los acuerdos estructurales de Estado-nación, acuerdos consulares, acuerdos diplomáticos».

 

Apoyo mermado

 

Pérez Pirela acotó que lo ocurrido en este caso evidencia que el número de países que originalmente reconocieron a Guaidó como presidente encargado ha ido reduciéndose y, además, la mayoría de ellos no ha roto relaciones con el gobierno de Maduro porque saben que es quien ejerce en la realidad las funciones que Guaidó pretende atribuirse. 

 

«Y aquí viene un dato importantísimo, ustedes saben que alrededor de 44 países aceptaron a Juan Guaidó y lo reconocieron como presidente, 44 países de casi doscientos países, 180 y pico países que tiene las Naciones Unidas; de ciento ochenta y pico países que tienen las Naciones Unidas. Pero de estos 44, más de 20, es decir, casi la mitad reconocen a Guaidó pero siguen teniendo relaciones diplomáticas y consulares con el gobierno de Maduro. Les repito, alrededor de 44 países reconocieron a Guaidó, de casi 183 países aproximadamente tienen las Naciones Unidas, es decir, un tercio, pero de esos 44 países, más de 20 tienen relaciones consulares y diplomáticas con Maduro, por lo cual Duque está haciendo el ridículo de su vida».

 

Tsunami en la clase política colombiana

 

El otro aspecto abordado por Pérez Pirela en su análisis se refiere a las consecuencias que podría tener la captura de Merlano en Venezuela, ya sea que se concrete la extradición o no.

 

«Hay cosas aquí que no tienen ningún sentido ni ninguna lógica, a menos que nosotros comencemos a pensar mal y a plantear que quizás Duque no quiere que le extraditen a la congresista Aída Merlano, quien fue capturada por corrupción electoral. Un político llamado Rodolfo Hernández le dijo a la revista Semana que la exsenadora tiene verdades que le interesan a Colombia, pero estas verdades pueden hacer caer parte del mundo político colombiano. También dice que si será que con este caso Duque quiere tapar los quince millones de colombianos aguantando hambre. Lo está diciendo un futuro candidato presidencial colombiano, ¿será que quiere tapar los diez millones de colombianos que viven con dos dólares al día? ¿O quizás que quiere tapar Duque los cinco millones de colombianos que viven con un dólar al día?».

 

Respecto a los efectos que podría tener en las élites políticas del país vecino, enfatizó que Merlano fue capturada por corrupción electoral. «En Colombia hay casas políticas, hay unas muy importantes en la Costa Atlántica, de la cual estamos hablando, pero también en la Costa Pacífica, donde meses antes de las elecciones ya se están comprando los votos. Aída Merlano conoce los secretos de la corrupción electoral que demostraría en todo caso que en Colombia, o que en la democracia colombiana existe una red y un entramado de corrupción sin parangón. Toda esa información en estos momentos la tiene Nicolás Maduro Moros y Aída Merlano está hablando. Ustedes se dan cuenta que esto pica y se extiende y que esto no es un tema solamente de extradición, o que Duque le pide a Guaidó que por favor… No, no, no, más allá de la ridiculez de un Duque que le pide a Guaidó que extradite a quien él no puede extraditar, lo que está detrás de esto es entramados de corrupción colombiana en manos de Nicolás Maduro y de la justicia venezolana. ¿Qué me les parece a ustedes? ¿Ven que esto no es tan ingenuo como parece?».

 

Según el enfoque del también director de LaIguana.TV, es obvio que Guaidó es apenas un tonto útil de esta historia. «Ya les voy a decir por qué. En Colombia se está hablando de prevaricar, que significa faltar conscientemente, en el caso de un funcionario, a los deberes de su cargo al tomar una decisión o dictar una resolución injusta con plena conciencia de su injusticia. En otras palabras, se puede hablar de prevaricar en el caso de Duque, que sabe muy bien que Guaidó no tiene la competencia de extraditar a la congresista Aída Merlano y que voluntariamente se la está pidiendo porque sabe que no se la va a dar. ¿Por qué prevaricar? Porque si se la diera, le estaría dando las llaves para que el mismo partido de Duque, Uribe y otro entramado más del mundo político colombiano sea descubierto en una grandísima farsa electoral y red de corrupción que haría temblar la mal llamada democracia colombiana. Y si se quiere conjugar el verbo prevaricar al subpresidente Duque, hay que decir entonces, como lo han dicho muchos analistas colombianos, que Duque, con plena consciencia de su injusticia, está haciendo todo para que esta señora no pise otra vez Colombia, es decir está inmerso en un acto inconstitucional. ¿Ven que esto es más grave de lo que parece? Cuando uno empieza a escudriñar se da cuenta que esto pica y se extiende».

 

En su opinión, el gran miedo del mundo político colombiano es que Maduro, a cuentagotas y cada quince días, vaya sacando en capítulos, cual serie de Netflix, nombres, hechos de corrupción, elecciones manchadas por fraude, de Colombia. «El mundo político colombiano sabe muy bien que la congresista Aída Merlano se fue de Colombia con maletas llenas de pruebas, de audios y de videos que ciertamente comprometen al gobierno de Duque, no solamente a las casas políticas de la costa atlántica sino también al alto plano bogotano, por eso es que Duque le pide a Guaidó que le entregue a la congresista, sabiendo que Guaidó es un tonto útil en esta historia, lo digo por segunda vez».

 

Continuando con su revisión de los medios de comunicación neogranadinos, resaltó que alguno de ellos comentaron que Guaidó escribió una carta, un comunicado de la presidencia ficticia, diciendo que él hará todo lo posible y prestará toda la colaboración. «Esa es una confesión de parte. Cuando dice: voy a hacer todo lo posible, voy a prestar toda la colaboración, es que no tiene el Poder Ejecutivo, el poder de ejecutar, porque quien tiene el poder de ejecutar no va a prestar toda la colaboración, sino que ejecuta».

 

«Otros analistas dicen por ahí: bueno, es que Maduro se debe estar frotando las manos. Claro que se debe estar frotando las manos ¿y quién no? Imagínate, que el gobierno de Duque trató de invadir a Venezuela, no lo logró; que en Colombia se realizaron los ensayos, las pruebas para el magnicidio con los drones que también falló aquí; que Colombia es el gobierno que desconoció a Nicolás Maduro y además rompió todo tipo de relaciones. Ahora, este enemigo de Maduro, Duque, está temblando porque Maduro tiene a la excongresista con todas las pruebas de actos de corrupción. ¿No se va a frotar las manos? ¿Quién no se frotaría las manos, por Dios? Aída Merlano tiene todas las pruebas que demuestran la ficción de la democracia colombiana manchada con dinero corrupto, fruto del narcotráfico».

 

Expresó que la política exterior del gobierno de Duque parece ir a contrapelo de la tradición de la cancillería colombiana, actuando más por intereses ideológicos de derecha que por reales intereses pragmáticos que deben caracterizar las relaciones entre los estados. «¿Por qué pragmáticos? Yo necesito la ex congresista, ¿qué tengo que hacer? Solicitarlo a los poderes constituidos de Venezuela. Pero ellos prefieren seguir la ficción de Guaidó por razones de ideología neoliberal o lo que ustedes quieran, ideología de derecha. Ellos están dejando eso que en derecho internacional se llama la raison d ‘État, la razón de Estado, que debe estar por encima de los intereses partidistas o ideológicos de Uribe o Duque, es decir, le están haciendo, como dicen los italianos, sufrir la gran figuraccia, el gran ridículo. Y aquí viene la pregunta de las cien mil lochas, y esa se la escuché a un periodista de la revista Semana ¿a quién le conviene que Aída Merlano se extradite a Colombia? y ¿a quién no le conviene que Aída Merlano sea extraditada a Colombia y se quede en Venezuela? Dice este señor Rodolfo Hernández (que quiere optar a la presidencia de Colombia) que al menos el 55% de la clase dirigente colombiana caería en desgracia cuando esta señora comience a hablar. Es decir, que sería un tsunami político para la democracia colombiana, sumergida hasta el cuello, en la compra de votos  y en la corrupción electoral».

 

Pérez Pirela deja en el aire la  pregunta de si Maduro sacará a la luz pública todas las canciones que está cantando  en estos momentos Merlano.  «No quisiera yo estar en el puesto de Duque, que se la tiró de machito e hizo más que el mismo Trump contra el gobierno de Nicolás Maduro y que ahora se encuentra con que Maduro tiene en en su poder a la congresista que guarda los secretos de corrupción del mundo político y del partido de Duque».

 

Según el conductor de Desde donde sea, lo que cuente Merlano, ahora en manos de la justicia venezolana, nos va a dar muchas luces sobre cuál es el verdadero narcoestado: ¿Venezuela o Colombia?, de cuál es la verdadera dictadura: Venezuela o la supuesta democracia colombiana, metida hasta los tequeteques en actos de corrupción electoral. «También queda claro quién es el verdadero presidente de Venezuela: Nicolás Maduro, que apresa a Aída Merlano o Juan Guaidó que está ahorita haciendo cola fuera de la Casa Blanca a ver si  Trump, en medio de un juicio político, lo quiere atender… Pero sobre todo, estos hechos demuestran que por más que uno vocifere que es presidente, a la hora de las chiquitas, es decir, de apresar, de extraditar, no eres presidente, Juan Guaidó.  Y para tu infortunio, el de Duque y el de Uribe, la exsenadora Merlano cayó en manos del presidente constitucionalmente electo de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros».

 

Durante el programa, Pérez Pirela destacó el hecho de que Merlano no es la única persona de nacionalidad colombiana que está detenida en Venezuela a la espera de que el gobierno de Duque solicite su extradición. «Hay más de 30 capturados, diría yo altos capos, capturados por el gobierno de Nicolás Maduro que están aquí esperando, porque el gobierno de Colombia los pida en extradición ¿pero a quién? Al Presidente legítimamente constituido, Nicolás Maduro. Ahh, y entre esos 30 están algunos de los capos de Los Rastrojos. Y ahí entonces comenzamos a llegar al llegadero.  ¿Ustedes creen que Nicolás Maduro se los va a dar a Duque, cuando Duque no reconoce a Nicolás Maduro? O voy más allá, quizás es muy obvia mi pregunta, si Los Rastrojos ayudaron a entrar a Juan Guaidó a Colombia para que después los recibiera con alfombra roja Duque (en febrero de 2019) ¿ustedes creen que Duque le va a pedir a Juan Guaidó que extradite?».

 

El programa de este jueves 30 de enero, segundo de la segunda temporada de Desde donde sea, fue transmitido desde Caracas a través de diversas plataformas digitales. Como de costumbre, tuvo amplio feedback de usuarias y usuarios que reportaron sintonía tanto desde diversas ciudades de Venezuela como desde varios países latinoamericanos y caribeños, Estados Unidos, Canadá y naciones de Europa.

 

(LaIguana.TV)