Jhon Jairo Velásquez Vásquez, uno de los sicarios favoritos del fallecido narcotraficante Pablo Escobar Gaviria —ambos miembros del Cartel de Medellín— fue uno de los responsables de varios de los magnicidios que marcaron la violenta y criminal historia de Colombia y que conmocionaron a la población, víctima del miedo y la zozobra generalizada.

 

Conocido también como alias «Popeye», Velásquez confesó haber asesinado personalmente a unas 300 personas, incluso a una de sus parejas, y también participó junto a la banda de criminales que coordinaba, en el homicidio de otras 3.000 para cumplir con las órdenes de Escobar.

 

Popeye falleció este jueves —6 de febrero de 2020— en horas de la madrugada a los 57 años de edad por un cáncer de esófago en fase terminal (estado IV), con metástasis en pulmones, hígado y otros componentes abdominales. Se encontraba en el Instituto Nacional de Cancerología, en Bogotá, y la información fue confirmada por el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).

 

El sicario se encontraba hospitalizado recibiendo tratamiento paliativo desde el pasado 31 de diciembre. Popeye había salido de libertad en 2014 tras cumplir 24 años de cárcel —desde 1992— por diversos delitos que van desde el terrorismo y el narcotráfico hasta el asesinato. Su libertad fue muy controvertida en la sociedad colombiana.

 

Durante su libertad dio diversas entrevistas y hasta logró convertirse en «youtuber». Publicó un par de libros y se prestó para la campaña de desprestigio contra Venezuela atacando directamente al presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello.

 

El 25 mayo de 2018 volvió a ser capturado y enviado a prisión tras ser condenado por extorsión y asociación para delinquir tras amenazar a dos familias en Medellín a quienes les habría exigido el pago de 50.000 dólares a cambio de no tomar represalias.

 

El diario colombiano El Tiempo reseñó la muerte de Popeye, nacido en Yarumal, Antioquia, el 15 de abril de 1962, como «uno de los más temibles asesinos del cartel de Medellín», quien «en 1989 estuve al frente de varias de las acciones que más dolor causaron en Colombia».

 

Algunos de los magnicidios perpetrados por Velásquez fueron el asesinato del excandidato presidencial Luis Carlos Galán Sarmiento el viernes 18 de agosto de 1989; el atentado al avión de Avianca ejecutado el lunes 27 de noviembre de 1989 y en el que murieron 107 personas, 6 de la tripulación y 101 pasajeros.

 

La explosión en Bogóta del edificio del extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) un organismo estatal encargado de realizar la Inteligencia y Contrainteligencia en Colombia, fue otro atentado terrorista en el que participó Popeye. El suceso ocurrió el miércoles 6 de diciembre de 1989 y la bomba mató en el acto a 63 personas, hirió a más de 600 y dejó multimillonarios daños a edificaciones, comercios y viviendas de la ciudad.

 

Otros crímenes que se le adjudican a «Popeye» son los asesinatos del director del diario El Espectador, Guillermo Cano —el 17 de diciembre de 1986— quien denunciaba los crímenes del cartel de Medellín y responsabilizaba directamente a Pablo Escobar; y el del exprocurador de la nación, Mauro Hoyos, el 25 de enero de 1988.

 

(LaIguana.TV)