En la mañana de este sábado, el mayor general Néstor Reverol, ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, informó al país los detalles relativos a los actos de corrupción por los cuales fue detenido el pasado 3 de marzo el coronel retirado Oscar Aponte Landaeta, quien ejercía como presidente de Aceites y Lubricantes Venezolanos, S.A. (Vassa).
La aprehensión de Aponte Landaeta estuvo precedida por una operación de inteligencia bajo la conducción del Ministerio Público y en ella se demostró que desde Vassa se desviaba hacia el mercado negro material estratégico “como lubricantes, grasa y ácido sulfúrico”, según refirió el ministro.
En primer término, los servicios de inteligencia detectaron que la empresa produjo durante el mes de diciembre de 2019, 792.821 litros de lubricante, de los cuales, el 25% –199.098 litros– fue destinado al estado Barinas.
Además, las pesquisas evidenciaron que dentro de la producción destinada a Barinas, 122.448 litros –aproximadamente, el 61%– se desviaron a una empresa privada llamada Autopartes y Repuestos NK, C.A., lo que equivale al 15,44% de la producción mensual en todo el país.
Esta situación, creó “condiciones de desabastecimiento, (…) usura y sobreprecio” y puso “en riesgo la estabilidad del mercado nacional de lubricantes”, explicó Reverol.
Asimismo, el alto funcionario precisó que, entre otros manejos administrativos inadecuados, los efectivos de inteligencia detectaron “manipulación del sistema informático de Vassa, para favorecer y ocultar despachos de lubricantes, a través de [la] asignación de [un] mismo código de cliente” a distintas empresas.
(LaIguana.TV)
