La pandemia del coronavirus y el distanciamiento social han ‘inspirado’ a una pareja sueca a abrir un restaurante tan peculiar como seguro, donde podrá comer una sola persona a la vez, y sin tener ningún contacto con el personal.

 

En marzo, Linda Karlsson y su esposo, el chef Rasmus Persson, recibieron una visita inesperada de los padres de Karlsson. Como no querían poner en riesgo a los familiares, ambos mayores de 70 años, colocaron una mesa en el prado fuera de su casa y les sirvieron la comida a través de la ventana.

 

Así fue como nació la idea de Bord för En (‘Mesa para uno’), un restaurante donde solo habrá una mesa y una silla en medio del campo. El local abrirá el próximo 10 de mayo, las reservas estarán disponibles entre las 10:00 y las 22:45, si bien solo una persona puede reservar por día.

 

Pago voluntario

 

Ese invitado especial podrá elegir un desayuno, almuerzo o cena de tres platos vegetarianos, acompañados de una bebida local no alcohólica y servidos en una canasta de picnic que se enviará por una soga con la ayuda de una vieja rueda de bicicleta, para evitar cualquier tipo de contacto. El cliente podrá colocar platos usados dentro de un cubo al lado de la mesa y hacer sonar una campana para el próximo plato.

 

Al final de la comida, los comensales pueden pagar la cantidad que les parezca adecuada. «Nos gusta adaptarnos a la situación en la que se encuentran las personas», explica Karlsson, citado por Atlas Obscura.

 

Bord för En es el único restaurante en el pueblo sueco de Ransäter y ya ha generado un gran interés. La pareja ha recibido reservas de toda Suecia e incluso de Japón. Si bien no está claro cuándo los comensales japoneses podrán viajar a Suecia, Karlsson cree que un lugar para las comidas solitarias podría ser una buena idea incluso cuando la amenaza haya desaparecido. «Para honrar realmente la compañía de uno, creo que este restaurante es una buena opción para que las personas se conozcan mejor», estima.

 

(RT)

Una sola mesa, un comensal y sin contacto humano: así es un restaurante sueco 'inspirado' por el coronavirus