A pesar de los esfuerzos e incentivos económicos realizados por el gobierno nacional a la población venezolana, resulta casi imposible adquirir una prenda de vestir debido a los altos costos. La escalada especulativa ha sobrepasado los límites lográndose encontrar precios muy por encima del ingreso del venezolano promedio. Calzados que excede los 2 millones de bolívares así como franelas que llegan fácilmente al medio millón es parte de lo que se observa repetidamente en las vidrieras.
Los ciudadanos se han visto en la obligación de optar por otras alternativas, como ferias “vintage” donde puede adquirir ropa y artículos usados o reformular sus propias prendas.
(LaIguana.TV)
