El fiscal de Ginebra Yves Bertossa, que investiga las finanzas de Corinna Larsen y del rey emérito, ha incluido en sus indagaciones una casa de campo señorial en el oeste de Inglaterra. El inmueble fue comprado en 2015 por seis millones de libras (6,7 millones de euros) por la examante del rey emérito. La lujosa mansión figura a nombre de Jade Trust, una fundación panameña, cuyo beneficiario es un hijo de Larsen, Alexander, de 18 años, según la documentación a la que ha tenido acceso EL PAÍS.

La propiedad Chyknell Hall Estate, de 200 acres (unas 81 hectáreas), 11 habitaciones, biblioteca y campo de críquet, fue adquirida por Larsen en 2015, quien afirma que ha invertido una cantidad similar al precio de la propiedad en renovarla.

Larsen está siendo investigada desde 2018 en Suiza por un presunto delito de blanqueo agravado de capitales. En 2012, la empresaria recibió por parte de Juan Carlos I una donación de 64,8 millones, transferidos desde la cuenta suiza de la fundación panameña Lucum, del rey emérito, en la banca Mirabaud, a otra de Larsen en el banco Gonet&Cie, en Bahamas.

El fiscal jefe del Cantón de Ginebra ha puesto el foco de su investigación en la lujosa casa de campo británica porque se compró con posterioridad a que Larsen recibiera la donación del rey emérito y por la opaca estructura que creó ella, tras la que figura su hijo, entonces con 13 años. La mansión se encuentra en Bridgnorth (Shropshire), en el corazón de la campiña inglesa, cerca de Gales, y en un entorno de máxima privacidad. Fue construida en 1814 y acoge otras cinco casitas de campo dentro de la propiedad. Entre sus servicios cuenta con establos, piscina, pista de tenis, bodega y sala de billar, según los anuncios publicados en medios inmobiliarios ingleses antes de que la comprara Larsen.

En julio de 2015, el periódico local Express&Start publicó un artículo titulado “El misterioso comprador de Chyknell Hill” en el que informaba de la millonaria venta. Un portavoz de la inmobiliaria lo atribuía entonces al acuerdo de confidencialidad firmado con el comprador. Larsen adquirió la propiedad por seis millones de libras (6,7 millones de euros) mediante un préstamo de su sociedad panameña Solare —la beneficiaria última de la donación de Juan Carlos I— en favor de Honeybird Group Corporation, otra sociedad instrumental inscrita en el registro de Panamá el 12 de marzo de 2015.

El fiscal Bertossa ha interrogado a Larsen sobre la compra de esta mansión y, según el texto de su declaración, a la que ha tenido acceso este diario, respondió así: “Lo adquirí para mi hijo Alexander en 2015. Lo hice por seis millones de libras. No estaba en buen estado, por lo que invertí en importantes trabajos de renovación que ascendieron a alrededor de seis millones de libras”. Y añadió: “Es correcto que la adquisición se hizo vía un préstamo de Solare a favor de Honeybird Corporation. Adquirí esta mansión a través de un trust [fundación] cuyo beneficiario era mi hijo. Recurrí a una estructura como esta porque estimaba que mi hijo, una vez que fuera mayor de edad, no tendría la madurez suficiente para administrar este bien. Tenía 13 años cuando compramos la mansión”. Las fundaciones o trust son instrumentos financieros que facilitan la opacidad y permiten ocultar la identidad de los beneficiarios de los fondos que administran en cuentas bancarias. Estas se pueden abrir a nombre de la fundación sin registrar el de su dueño real.

(elpais.com)