Shinzo Abe confirmó hoy su intención de renunciar próximamente como primer ministro de Japón por razones de salud, lo que abre un período de consultas que terminará en las próximas semanas con la elección de su sustituto.

«Mis condiciones de salud no son perfectas. Una salud pobre puede derivar en decisiones políticas erróneas (…). He decidido renunciar como primer ministro», afirmó Abe en una rueda de prensa.

Abe, de 65 años, señaló que la colitis ulcerosa crónica que le obligó a dimitir en su primer mandato (2006-2007) ha regresado recientemente, y el tratamiento que debe recibir exige una revisión continua y vigilada.

En sus declaraciones a los periodistas en la sede de la jefatura del Gobierno (Kantei), Abe recordó que aunque esa enfermedad le obligó a renunciar hace trece años gracias a una nueva medicación pudo superarlo y convertirse en primer ministro de nuevo en 2012.

«Durante ocho años he podido manejar bien mi enfermedad, y he sido capaz de dedicarme por entero a mis obligaciones como primer ministro», agregó.

Sin embargo, en julio pasado tuvo un chequeo regular y se encontraron señales de que estaba regresando esta enfermedad, y a partir de entonces ha comenzado el tratamiento con un nuevo medicamento.

«Desde el mes pasado -agregó- mi salud se ha deteriorado, y he perdido mucha fuerza (…). El nuevo fármaco que me están administrando exige un monitoreo continuo y estrecho».

(EFE)